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Estudio-vida de 1 y 2 Timoteo, Tito y Filemónpor Witness Lee

ISBN: 0-7363-2769-X
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Actualmente disponible en: Capítulo 15 de 28 Sección 1 de 3

ESTUDIO-VIDA DE 2 TIMOTEO

MENSAJE TRES

AQUEL QUE ADMINISTRA LA VACUNA

Lectura bíblica: 2 Ti. 2:1-15

Hemos señalado que el tema de 2 Timoteo es la vacuna contra la decadencia de la iglesia. En este mensaje abarcaremos 2:1-15, donde se mencionan cinco designaciones específicas atribuidas a la persona que administra esta vacuna. Estas designaciones son: maestro, soldado, competidor (un atleta), labrador y obrero. Si leemos estos versículos detenidamente, veremos que Pablo consideraba a Timoteo y a sus otros colaboradores como personas que debían ser maestros, soldados, competidores, labradores y obreros.

I. UN MAESTRO

En 2:1 Pablo dice: “Tú, pues, hijo mío, fortalécete en la gracia que es en Cristo Jesús”. La palabra “pues” hace referencia al capítulo uno. La exhortación que Pablo hace en 2:1 está dentro del contexto de lo mencionado en el capítulo anterior. Así que, con base en lo que le acaba de escribir a Timoteo, Pablo ahora lo alienta a que se fortalezca en la gracia que es en Cristo Jesús. Pablo no exhortó a Timoteo a que se fortaleciera en el conocimiento o en los dones, sino a que se fortaleciera en la gracia. El apóstol mismo había tenido experiencias de ser fortalecido por la gracia en vida (1:9-12), y ahora exhortaba a Timoteo a que se fortaleciera en esa misma gracia. Tal gracia es la provisión de vida que Dios nos brinda para que vivamos conforme a Su propósito. Pablo, en lugar de desalentarse, se había fortalecido en la gracia, a pesar de que estaba en una cárcel. Él sabía muy bien que la gracia es nada menos que el Dios Triuno procesado: el Padre corporificado en el Hijo y el Hijo hecho real como el Espíritu que mora en nosotros. En 2 Corintios 13:14 vemos que la gracia es el propio Dios Triuno: “La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros”. La gracia no es una cosa, sino una persona única, la persona divina y viviente del Dios Triuno, quien pasó por un proceso para llegar a ser el Espíritu vivificante y todo-inclusivo que mora en nosotros. Este Espíritu reside ahora en nosotros como nuestra gracia. Todos podemos fortalecernos en esta gracia, esto es, en el Dios Triuno que pasó por un proceso para que lo pudiésemos disfrutar.

Cuanto más nos fortalezcamos en esta gracia, más idóneos seremos para enseñar a otros. Es por ello que en el versículo 2 Pablo añade: “Lo que has oído de mí mediante muchos testigos, esto confía a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros”. Al decir “esto”, Pablo se refería a las sanas palabras de 1:13. Las sanas palabras, después que son confiadas a hombres fieles, se convierten en el buen depósito de ellos (1:14). Esto indica que si alguien en una iglesia local tiene un depósito de las sanas palabras del Señor, debe adiestrar a hombres fieles, a hombres fidedignos, para que ellos también tengan del Señor un buen depósito y sean idóneos para enseñar a otros.

Pablo sabía que Timoteo había recibido un buen depósito, que había sido enseñado y nutrido con las riquezas de la gracia. Por consiguiente, él exhortó a Timoteo a que confiara estas cosas a otros que fueran fieles e idóneos para ejercer el mismo ministerio. Esto indica que se necesita más que una sola persona para distribuir las riquezas de la economía neotestamentaria de Dios. Mi esperanza es que a través de los mensajes de estudio-vida, miles de santos que están en el recobro del Señor reciban un buen depósito de las riquezas de la gracia con respecto a la economía neotestamentaria de Dios, y que después de recibir tales riquezas, las confíen a otros. Imagínense cómo sería si el Señor pudiera contar con diez mil santos que estuvieran llenos de Su buen depósito, y si ellos propagaran las riquezas de Su economía en toda la tierra. Sin duda, esto aceleraría el tiempo de Su gloriosa aparición.

Hay un solo Dios, un solo Cristo, un solo Espíritu y una sola iglesia. Puesto que Dios es uno solo, Él debe de tener un solo camino. ¿Podemos acaso encontrar este camino en el catolicismo o en las denominaciones o en el movimiento carismático? ¡Por supuesto que no! Ni siquiera podemos encontrarlo en los grupos cristianos independientes. El camino de Dios únicamente se halla en Su recobro. De hecho, el recobro consiste en recobrar el camino de Dios. Muchos santos pueden testificar con una conciencia pura, desde lo más recóndito de su ser, que si ellos no siguieran el camino del recobro, no tendrían otro camino que seguir. El recobro del Señor es el único camino. Digo esto no porque el Señor me haya usado en Su recobro, sino simplemente porque es un hecho. Algunos que se volvieron disidentes y abandonaron la iglesia, descubrieron que les era imposible regresar a las denominaciones. En algunos casos, puede ser que ni siquiera las denominaciones estén dispuestas a recibirlos. Esto nos muestra que si tocamos el recobro y luego lo abandonamos, cometemos suicidio espiritual, pues nos apartamos del único camino que Dios ha escogido.

En 2:1 y 2 vemos que Pablo tenía la carga de exhortar a Timoteo, quien había recibido un buen depósito, a que trasmitiera a otros las riquezas de la gracia. De este modo, habría muchos maestros, muchos ministros de Cristo, que propagarían las riquezas de la economía neotestamentaria de Dios.


Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.

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