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Estudio-vida de Josué, Jueces y Rutpor Witness Lee

ISBN: 978-0-7363-6224-5
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea

Actualmente disponible en: Rut 6 de 8 Capítulo 6 de 33 Sección 1 de 2

ESTUDIO-VIDA DE RUT

MENSAJE SEIS

BOOZ Y RUT TIPIFICAN A CRISTO Y LA IGLESIA

Lectura bíblica: Rt. 2:1, 14-16; 3:15; 4:9-10, 13

En todos los mensajes sobre Josué, Jueces y Rut he recalcado que debemos ganar a Cristo, experimentarle y disfrutarle para poder ser la iglesia. En este mensaje consideraremos cómo Booz y Rut tipifican a Cristo y la iglesia. Booz tipifica a Cristo, y Rut no solamente tipifica a los santos buscadores, sino a la iglesia. En último análisis, Rut tipifica a la iglesia.

I. BOOZ TIPIFICA A CRISTO

A. Dos personas prominentes que tipifican a Cristo

Tanto al inicio como al final del período de la historia de Israel relatado en estos libros —desde Josué hasta Rut— encontramos dos personas prominentes que tipifican a Cristo (Jos. 1:1; Rt. 4:21). Estas personas son Josué y Booz, los cuales representan dos aspectos de una misma persona.

1. Josué está al comienzo

Al comienzo está Josué, quien tipifica al Cristo que introduce al pueblo escogido de Dios en las bendiciones ordenadas por Dios (Jos. 1:2-4; Ef. 1:3-14). Según lo tipificado por Josué, Cristo nos ha introducido en la buena tierra, ha tomado posesión de dicha tierra para nosotros y nos ha asignado la tierra a fin de que sea nuestra heredad para que la disfrutemos. Cristo ha ganado la buena tierra para nosotros y, a la postre, Él es la buena tierra que nosotros disfrutamos.

2. Booz está al final

Al final está Booz, quien tipifica a Cristo en varios otros aspectos. En particular, él tipifica a Cristo como nuestro Marido, quien nos trae satisfacción.

B. Los aspectos en los cuales Booz tipifica a Cristo

Booz tipifica a Cristo en dos aspectos.

1. Como hombre de abundantes riquezas
y generoso al dar

Como hombre de abundantes riquezas y generoso al dar (Rt. 2:1, 14-16; 3:15), Booz tipifica a Cristo, Aquel cuyas riquezas divinas son inescrutables y que atiende a los necesitados del pueblo de Dios con Su abundante suministro (Ef. 3:8; 2 Co. 12:9; Fil. 1:19b).

Lamentablemente, muchos de los cristianos hoy en día no experimentan a Cristo en Sus riquezas ni lo poseen como su Marido. En la iglesia tenemos a Cristo como nuestras riquezas y también como nuestro Marido. En Efesios Pablo habla de las inescrutables riquezas de Cristo (3:8). Él también habla de Cristo como Marido de la iglesia (5:23-32). En Apocalipsis, nuestro Marido es revelado como el Cordero, el Dios redentor (21:2, 9). La Biblia revela, por tanto, que Cristo con Sus riquezas inescrutables es nuestro Marido. En los últimos dos capítulos de la Biblia vemos que Cristo, el Cordero, es nuestro Marido y que nosotros, los creyentes en Cristo, somos la esposa del Cordero.

2. Como pariente cercano de Mahlón

Como pariente cercano de Mahlón, el difunto esposo de Rut, que redimió los derechos perdidos sobre las propiedades de Mahlón y que tomó a la viuda de Mahlón, Rut, por esposa a fin de producir los herederos necesarios (Rt. 4:9-10, 13), Booz tipifica a Cristo, Aquel que redimió a la iglesia e hizo de ella Su complemento para producir Su aumento (Ef. 5:23-32; Jn. 3:29-30).

II. RUT TIPIFICA A LA IGLESIA

A. Rut, una mujer en Adán
según la creación de Dios
y una moabita según la caída del hombre,
representa al viejo hombre en estos dos aspectos

Rut, una mujer en Adán según la creación de Dios y una moabita según la caída del hombre, representa al viejo hombre en estos dos aspectos conforme a los cuales ella tipifica a la iglesia, antes de su salvación, como hombres según la creación y pecadores según la caída del hombre, que conforman “nuestro viejo hombre” (Ro. 6:6). Rut llegó a ser una moabita no debido a la caída del hombre, sino en la caída del hombre. Los moabitas, un pueblo nacido del incesto, tipifican a todos los pecadores, pues todos los pecadores nacieron de un incesto (Jn. 8:41, 44a). Esto quiere decir que Rut no es la única con un antecedente incestuoso. Todos tenemos ese mismo pasado. Adán y Eva se unieron a Satanás, es decir, se casaron con Satanás. Como seres humanos creados por Dios, nosotros deberíamos habernos casado con nuestro Hacedor, tomándolo a Él como nuestro Marido (Is. 54:5), pero en lugar de ello, nos casamos con otra criatura, con Satanás. Esto es incesto.


Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.

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