Información del libro

Estudio-vida de Hechospor Witness Lee

ISBN: 978-0-7363-1419-0
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea

Actualmente disponible en: Capítulo 5 de 72 Sección 1 de 3

ESTUDIO-VIDA DE HECHOS

MENSAJE CINCO

INTRODUCCION Y PREPARACION

(3)

Lectura bíblica: Hch. 1:1-26

Hechos 1:3-26 es una sección relacionada con la preparación. Ya vimos que en 1:3-8, Cristo prepara a los discípulos en Su resurrección. Ahora estudiaremos la ascensión de Cristo (vs. 9-11) y veremos cómo los discípulos se prepararon (vs. 12-26).

LA ASCENSION DE CRISTO

Hechos 1:9 dice: “Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos”. El Evangelio de Lucas concluye con la ascensión del Señor al cielo (Lc. 24:51), y el libro de Hechos comienza con esto mismo. Lucas narra el ministerio terrenal del Jesús encarnado, mientras que Hechos relata el ministerio del Cristo resucitado y ascendido, efectuado desde el cielo mediante Sus creyentes en la tierra. En los evangelios, el ministerio terrenal del Señor, que El mismo efectuó, consistió solamente en sembrarse como semilla del reino de Dios en Sus creyentes, sin que la iglesia fuera aún edificada. En el libro de Hechos, el ministerio celestial del Señor, llevado a cabo por medio de los creyentes en la esfera de la resurrección y ascensión, consiste en propagarle a El por todo el mundo, como desarrollo del reino de Dios, a fin de que la iglesia sea edificada (Mt. 16:18) y se produzca Su Cuerpo, el cual es tanto la plenitud de Cristo, Su expresión (Ef. 1:23), como la plenitud de Dios (Ef. 3:19), la expresión de Dios.

Leamos Hechos 1:10-11: “Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, mientras El se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué os quedáis mirando al cielo? Este Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, vendrá de la misma manera que le habéis visto ir al cielo”. La ascensión del Señor hace alusión a Su segunda venida. Entre estos dos eventos se encuentra la dispensación de la gracia, en la cual el Señor, quien es el Cristo pneumático, el Espíritu vivificante (1 Co. 15:45), aplica Su redención todo-inclusiva a los escogidos de Dios a fin de que reciban la plena salvación, y así El pueda producir y edificar la iglesia como Su Cuerpo, con miras al establecimiento del reino de Dios en la tierra.

La visión de la ascensión de Cristo al cielo fortaleció la fe que los discípulos tenían en El y en lo que El había hecho por ellos mediante Su muerte y Su resurrección. También amplió la perspectiva que ellos tenían de la economía celestial de Dios, lo cual los había llevado a cooperar con el ministerio celestial de Cristo, todo esto con miras al cumplimiento de la economía neotestamentaria de Dios en la tierra.

El Señor Jesús, después de hablar con Sus discípulos durante cuarenta días acerca del reino de Dios, fue tomado de ellos de manera visible. El ascendió físicamente ante sus propios ojos. Podemos afirmar que eso también formó parte de la manera en que el Señor “educaba” a Sus discípulos.

Probablemente los discípulos quedaron muy asombrados y entusiasmados cuando presenciaron la ascensión de Cristo. Al verlo ascender, ciertamente no lloraron. Por el contrario, deben de haber estado muy felices de presenciar algo tan maravilloso.

Mientras los discípulos miraban al cielo, dos varones con vestiduras blancas se pusieron junto a ellos. Estos varones, quienes en realidad eran ángeles, les preguntaron a los discípulos por qué se quedaban mirando al cielo. Luego les dijeron que este Jesús que había sido tomado de ellos al cielo vendría de la misma manera que lo habían visto ir al cielo. Esto indica que así como el Señor Jesús ascendió físicamente, volverá del mismo modo. Cristo ascendió al cielo llevado por una nube, visible a los ojos humanos, y volverá de la misma manera (Mt. 24:30). Además, El ascendió desde la cumbre del monte del Olivar (Hch. 1:12), y volverá al mismo monte (Zac. 14:4). Creemos firmemente que al regresar, el Señor Jesús posará Sus pies sobre este monte.

LA PREPARACION DE LOS DISCIPULOS

Regresan a Jerusalén

Después de presenciar la ascensión del Señor, los discípulos “volvieron a Jerusalén desde el monte que se llama del Olivar, el cual está cerca de Jerusalén, camino de un día de sábado” (v. 12). Los discípulos regresaron a Jerusalén obedeciendo lo que el Señor les había dicho en Lucas 24:49 y Hechos 1:4, para recibir el Espíritu económico de poder como lo había prometido el Padre. Todos ellos eran galileos (v. 11). Así que, al quedarse en Jerusalén, especialmente bajo las amenazas de los líderes judíos, ellos arriesgaban su vida.

El versículo 12 declara que Jerusalén se encontraba camino de un día de sábado desde el monte del Olivar. Según la tradición judía, el camino de un día de sábado equivalía aproximadamente a un kilometro.


Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.

Back to Top