Fe cristiana normal, Lapor Watchman Nee
ISBN: 978-0-87083-779-1
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
ISBN: 978-0-87083-779-1
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
Font Size
Seleccionaremos algunos pasajes más para ver cómo Cristo consumó la redención por nosotros.
Romanos 5:6-8 dice: “Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. Pues apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. Mas Dios muestra Su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”.
Romanos 5:9-10 dice: “Mucho más, estando ya justificados en Su sangre, por medio de El seremos salvos de la ira. Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de Su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos en Su vida”. Esto nos muestra claramente que la muerte de Cristo no fue la muerte de un mártir. El no murió por una creencia o una causa. El murió por el pecado, para que se abriera un camino para que los pecadores sean declarados inocentes. Por consiguiente, 1 Corintios 15:3 dice que Cristo “murió por nuestros pecados”.
Hebreos 9:22b dice: “Sin derramamiento de sangre no hay perdón”. El pecado sólo se puede perdonar después del juicio.
En 1 Pedro 2:24 dice: “Quien llevó El mismo nuestros pecados en Su cuerpo sobre el madero, a fin de que nosotros, habiendo muerto a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados”. Luego 3:18 dice: “Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el Justo por los injustos, para llevaros a Dios, siendo muerto en la carne, pero vivificado en el espíritu”.
En 1 Juan 1:7 dice: “Pero si andamos en luz como El está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesús Su Hijo nos limpia de todo pecado”.
Isaías 53:6 dice: “Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él la iniquidad de todos nosotros”. La palabra “cargó” aquí puede también traducirse “puso sobre”. Todos nuestros pecados han sido puestos sobre Jesús. Un hermano que es contador dijo una vez que esto es como transferir una cuenta. Originalmente, el pecado estaba en nuestra cuenta. Ahora ha sido transferido a la cuenta de Jesucristo.
Una vez una persona le preguntó a un cristiano acerca del perdón. El cristiano le mostró este pasaje de Isaías y le dijo que si él podía entrar por ser parte del primer “todos” y salir por ser parte del segundo “todos”, sería salvo. Todos somos como ovejas descarriadas. Sí, yo estoy incluido. Soy un pecador que se ha descarriado. El Señor ha ocasionado que la iniquidad de todos nosotros sea colocada sobre El. Sí, todas mis iniquidades están sobre El.
Hay un himno que describe muy bien el gozo de esta salvación:
¿Por qué ansiedad, duda y temor?
Todo pecado, ¿no cargó
Sobre Su Hijo, Dios?
Cristo en la cruz murió por mí.
¿Pudiera Dios luego exigir
Otro pago de mí?
Completa redención logró
Mis deudas el Señor pagó,
De la ley libre soy.
No temo más la ira de Dios
Pues con Su sangre me roció,
Cubierto ahora estoy.
El mi perdón aseguró,
Obtuvo plena absolución
Mis deudas las pagó.
Dios no reclamará de dos,
De Su Hijo, mi Seguridad,
Y otra vez de mí.
Descanso y paz hoy míos son,
Mi Salvador me liberó
El todo consumó;
Sé que por Su sangre eficaz,
Dios ya no me condenará,
Pues, ¡El por mí murió!
Himnos, #466
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.