Evangelio de Dios, Elpor Watchman Nee
ISBN: 978-1-57593-940-7
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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No quiero enumerar en detalle todos los aspectos de la obra de comunión del Espíritu Santo. Sólo resaltaría una cosa: toda la obra del Señor Jesús nos es trasmitida hoy por medio del Espíritu Santo. Incluso el Señor Jesús mismo nos es trasmitido por medio de la obra del Espíritu Santo. Esta es la obra salvadora de Dios. Mucha gente no entiende la obra de comunión del Espíritu Santo. Ellos me preguntan cómo puede ser aplicada a nosotros en la actualidad la obra que el Señor llevó a cabo hace más de mil novecientos años. En realidad, si no existiera la obra del Espíritu Santo, sus preguntas estarían justificadas. ¿Cómo puede ser aplicada a nosotros hoy una obra que se llevó a cabo hace más de mil novecientos años? Lo que el Señor logró hace más de mil novecientos años no fue dejado para “secarse al viento y al sol”. Dios ha preservado y nutrido esta obra en el Espíritu Santo. Por eso esta obra permanece tan fresca. Hoy día podemos recibir la obra del Señor Jesús. Esta obra puede ser la misma que fue antes.
Una vez fui a una tienda y el empleado me dio una lata de sopa de vegetales importada. La lata se veía vieja y fea exteriormente. Estaba cubierta de polvo. El empleado me la recomendó mucho y estaba dispuesto a venderla con descuento. La compré y me la llevé a casa. Después cuando examiné la fecha, descubrí que tenía más años que yo. Cuando la abrí y la cociné, descubrí que la sopa todavía era gustosa. Si la obra del Señor no estuviera preservada en el Espíritu Santo, el tiempo y el espacio la afectarían. ¿Cómo podría entrar en mí el Salvador que murió en el Calvario hace más de mil novecientos años? Pero con el Espíritu Santo, no hay problema de tiempo ni de espacio. Dios ha preservado la obra del Señor en el Espíritu Santo. Ahora la obra del Señor está viva. Por eso el Espíritu Santo puede trasmitirnos esta obra.
Tengo un hermano que estudia bioquímica. El hace experimentos todo el tiempo. A fin de cultivar cierta bacteria, tiene que usar un químico especial. Mientras mantenga cierta temperatura, la bacteria vivirá. Si la temperatura baja o sube demasiado, o si algún otro elemento se agrega al cultivo, la bacteria muere. El mejor ambiente para preservar la obra del Señor es el Espíritu Santo. Si la obra del Señor sale del Espíritu Santo, no puede vivir y muere. Lo mismo sucede con la vida cristiana. La vida cristiana no se puede separar nunca del Espíritu Santo. Si las verdades entendidas por los hijos del Señor son separadas del Espíritu Santo, gradualmente se secarán y morirán. Por lo tanto, todos los asuntos espirituales deben estar en el Espíritu Santo. Fuera del Espíritu Santo, todo morirá; nada sobrevivirá. En El está la vida; fuera de El, todo está muerto.
Por medio del Espíritu Santo, Dios se trasmite y también nos comunica la obra del Señor. Dios ha preparado todo lo relacionado con nuestra salvación. Además, El Espíritu Santo ha venido y está listo para trasmitir todo lo que Dios ha preparado. Si un hombre aún no ha sido salvo, no puede decir que Dios no lo amó, o que el Señor Jesús no logró la redención para él. No puede decir que la palabra está muy lejos de él y que, por ende, no la puede alcanzar.
Amigo mío, ¿tiene usted boca? Algunos pueden argumentar que son mudos y que no tienen boca. Pero tienen corazón. Pueden estar sin boca. Pero no pueden estar sin corazón. Romanos 10:8-9 dice: “Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón ... que si confiesas con tu boca a Jesús como Señor, y crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo”. ¿Por qué? Porque Dios dijo que todo aquel que invoque el nombre del Señor será salvo. Tal vez usted se pregunte cómo puede ser tan simple y cómo uno puede ser salvo sólo por invocar. Porque el Espíritu Santo ha venido. El lo salvará tan pronto usted invoque. ¿Cómo puede uno invocar? Si tiene boca, la puede usar. Si no tiene boca, puede invocar con su corazón. Esta palabra no está lejos de nosotros. Esté en nuestra boca y en nuestro corazón. Esta es la palabra de la justificación por la fe que hemos hablado en estos días.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.