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Cristo maravilloso en el canon del Nuevo Testamento, Elpor Witness Lee

ISBN: 978-0-7363-7796-6
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CAPÍTULO SEIS

EL REINO DE LOS CIELOS

Lectura bíblica: Mt. 2:1-2; 4:17; 5:3, 20; 7:21-23; 9:35; 13:3; 15:26-27; 16:18-19; 18:17-18; 21:4-5; 27:37; 28:18-19

El Evangelio de Mateo es un libro que encierra un misterio. Los maestros de la Biblia apenas tienen debates sobre el Evangelio de Juan, pero por muchos siglos han tenido muchos debates acerca del Evangelio de Mateo. Esto se debe a que este libro es un libro que encierra un misterio. En Mateo encontramos algo que es sumamente misterioso.

EL REINO “SUSPENDIDO”

Muchos cristianos saben que Mateo nos dice que Jesús es el Rey. En Mateo 2:2 los magos preguntaron: “¿Dónde está el que ha nacido como Rey de los judíos?”. Asimismo, cuando Él fue crucificado, pusieron sobre Él un rótulo que decía: “EL REY DE LOS JUDÍOS” (27:37). Pero ¿qué significa que Jesús sea el Rey? El reino de Jesús se revela en este libro, pero es muy difícil entenderlo apropiadamente. Muchos maestros de la Biblia han tenido diferentes conceptos en cuanto al reino presentado en Mateo. Los maestros de la Asamblea de los Hermanos afirman que Jesús vino como rey para presentarle el reino de Dios al pueblo judío, pero debido a que ellos lo rechazaron, el reino fue suspendido. Luego dicen que Jesús empezó a edificar la iglesia cuando el reino fue suspendido y que un día, cuando acabe la era de la iglesia, el reino que fue suspendido será reestablecido. Algunos de los maestros dispensacionales dicen que el libro de Mateo es para los judíos, no para nosotros. Por lo tanto, vemos que hay diferentes conceptos acerca del Evangelio de Mateo. Esto se debe a que este libro es un libro misterioso. Por lo tanto, necesitamos tener perspicacia celestial y espiritual para poder leer este libro.

EL EVANGELIO DEL REINO

En este libro Jesús predicó el evangelio del reino. ¿Qué es esto? No es el evangelio de la gracia ni el evangelio del perdón, sino el evangelio del reino. Es fácil entender el evangelio de la gracia, pero no es tan sencillo entender el evangelio del reino. El Evangelio de Mateo nos habla del evangelio del reino. Jesús predicó y también predijo que este evangelio del reino sería predicado hasta lo último de la tierra, y entonces vendría el fin. El evangelio de la gracia ya ha sido predicado a todos los rincones de la tierra, mas no el evangelio del reino. Si usted fuera a África hoy, encontraría a muchos cristianos que conocen y han aceptado el evangelio de la gracia. Pero si les preguntara acerca del evangelio del reino, dirían que nunca han oído hablar de algo semejante. Por lo tanto, es necesario predicar más el evangelio del reino, y no sólo en África, sino también en los Estados Unidos. ¿Cree usted que los cristianos en los Estados Unidos saben en qué consiste el evangelio del reino? El Evangelio de Mateo, un libro que encierra un misterio, nos habla de algo escondido y misterioso.

LA SEMILLA DEL REINO

Permítame decirle algo más acerca de este Evangelio. Jesús es el Rey, pero también Él es el reino. En todo este mundo no hay ningún libro que nos diga que cierto rey sea la semilla de Su reino. Esto definitivamente es un idioma extraño y celestial. Además nos dice que cuando esta semilla crece, el reino se hace manifiesto. No es de extrañar que sea difícil entender este libro. Mateo nos dice que el Rey Jesús vino como sembrador. “Les habló muchas cosas en parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar” (13:3). Es cierto que Jesús vino como Rey, pero no como un Rey según nuestro concepto natural, según nuestra definición ni según nuestro entendimiento. Él es un Rey maravilloso y misterioso.

UN REY MANSO

¿Ha oído alguna vez de un rey que tome posesión de su cargo montado en un pollino? “Esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por medio del profeta, cuando dijo: ‘Decid a la hija de Sion: He aquí, tu Rey viene a ti, manso, y sentado sobre una asna, y sobre un pollino, hijo de bestia de carga’” (21:4-5). Supongamos que el presidente de los Estados Unidos tomara posesión de su cargo de esta manera. No creo que la gente lo aceptaría. Jesús es un rey de una manera completamente diferente de lo que pensamos según nuestra mentalidad natural. Conforme al versículo anterior, Él vino como un rey manso. Nuestro concepto es que un rey es alguien que ejerce autoridad para gobernar externamente a todos. Pero debemos desechar ese concepto, pues Jesús nunca fue semejante rey.


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