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Lecciones de la verdad, nivel uno, tomo 1por Witness Lee

ISBN: 978-0-87083-242-0
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Actualmente disponible en: Capítulo 5 de 69 Sección 1 de 4

LECCION DOS

EL DIOS TRIUNO

BOSQUEJO

  1. Dios siendo sólo uno.
  2. Dios teniendo el aspecto de tres: el Padre, el Hijo y el Espíritu:
    1. Dios hablando como Yo y también como Nosotros.
    2. El asunto del Padre, del Hijo y del Espíritu.
  3. El Padre, el Hijo y el Espíritu coexistiendo simultáneamente desde la eternidad hasta la eternidad:
    1. El Padre, el Hijo y el Espíritu, todos siendo Dios:
      1. El Padre siendo Dios.
      2. El Hijo siendo Dios.
      3. El Espíritu siendo Dios.
    2. El Padre, el Hijo y el Espíritu, todos siendo eternos:
      1. El Padre siendo eterno.
      2. El Hijo siendo eterno.
      3. El Espíritu siendo eterno.
    3. El Padre, el Hijo y el Espíritu coexistiendo simultáneamente.
  4. El Padre, el Hijo y el Espíritu, siendo coinherentes e inseparables.
  5. Los Tres —El Padre, el Hijo y el Espíritu— siendo uno:
    1. El Hijo siendo el Padre.
    2. El Hijo el Postrer Adán haciéndose el Espíritu vivificante.
    3. El Señor (el Hijo) siendo el Espíritu.
  6. La razón por la cual Dios es triuno.

TEXTO

La Biblia revela que Dios es triuno. Esta es una revelación de gran importancia. Dios es singularmente uno, y Su nombre es Jehová; sin embargo este Dios también es triuno: El es el Padre, el Hijo y el Espíritu. Esto es un misterio; de hecho, es un misterio de misterios. Tan pequeños y finitos como somos, nosotros los seres humanos no podemos entenderlo completamente; aun menos podemos definirlo de una manera plena. Muchas cosas relacionadas con el asunto de vida están fuera del alcance de los hombres; los hombres sólo pueden tener una idea general de ellas. Por ejemplo, aunque tenemos vida en nuestros cuerpos físicos, nadie puede explicarla a fondo, porque la vida es un misterio. Además, hay un espíritu dentro de nosotros: esto es aun más misterioso. Nadie puede dar una explicación plena de qué son la vida del hombre y el espíritu del hombre. Somos incapaces de comprender un misterio comparativamente tan pequeño como el hombre, sin mencionar el gran misterio del Dios Triuno: el Padre, el Hijo y el Espíritu. Si no podemos comprender completamente al hombre, ¡mucho menos al Dios Triuno!

No obstante, podemos recibir y disfrutar a este Dios misterioso. ¡No podemos comprender, pero podemos disfrutar! En tiempos pasados los hombres no tenían conocimiento de las vitaminas, aunque disfrutaron grandemente de su beneficio. El Dios Triuno no es para que le comprendamos sino para que le disfrutemos. Todo lo que El es para nuestro disfrute se revela en las Escrituras; no podemos comprenderlo completamente, sin embargo podemos, de acuerdo con todo lo que está declarado en las Escrituras, aceptar todo lo que se dice.

Aunque no podemos hallar el término “triuno” en las Escrituras, podemos ver el hecho concerniente a la Trinidad de la Deidad. Examinemos ahora los versículos en la Biblia que son relacionados más evidentemente con este asunto.

I. DIOS SIENDO SOLO UNO

Las Escrituras en muchos casos y en muchas maneras nos dicen que Dios es singularmente uno. Tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo, hay muchos pasajes que clara y definitivamente nos dicen que Dios es sólo uno. Primera de Corintios 8:4 dice: “No hay más que un Dios” e Isaías 45:5 dice: “Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí”. En los versículos 6, 21 y 22, 46:9 y 44:6, 8 también hallamos las mismas palabras.

En estos pasajes Dios repetidas veces dice: “No hay Dios aparte de mí”. El no dice: “No hay Dios aparte de nosotros”, sino “No hay Dios aparte de mí”. Mí es singular, sólo uno. Estas declaraciones repetidas de Dios fuertemente demuestran que Dios es singularmente uno.

El Salmo 86:10 dice: “Sólo tú eres Dios”. Aquí no dice: “Solamente vosotros sois Dios”, sino “Sólo tú eres Dios”. Esto también comprueba que Dios es sólo uno.

Que Dios sea uno es una revelación clara y definida en las Escrituras; también es un principio fundamental y consumado.

Quizás algunos pregunten: “Ya que Dios es sólo uno, ¿por qué Dios habló de Sí mismo como Nosotros en Génesis 1:26? Y, ¿por qué dijo: ‘nuestra imagen’?” ¿Hay sólo un Dios, o hay más de uno?” La respuesta es: El es el Dios Triuno; El es uno, sin embargo tres: el Padre, el Hijo y el Espíritu.


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