Información del libro

Mensajes de la verdadpor Witness Lee

ISBN: 978-0-7363-6894-0
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea

    Por favor, utilice Firefox o Safari
Actualmente disponible en: Capítulo 5 de 11 Sección 4 de 4

FIJARNOS EN LOS QUE CAUSAN DIVISIONES

Romanos 16:17 dice: “Ahora bien, os exhorto, hermanos, que os fijéis en los que causan divisiones y tropiezos en contra de la enseñanza que vosotros habéis aprendido, y que os apartéis de ellos”. Recientemente ha habido algunos entre nosotros que han causado divisiones y tropiezos en contra de la enseñanza que hemos aprendido. Debemos fijarnos en tales personas. Siempre que las veamos causando división, debemos apartarnos de ellas. Aunque esto no es agradable, es necesario para conservar la salud del Cuerpo. A fin de que el Cuerpo esté saludable, debe ser protegido de todos los factores que causan división.

Algunos de los que han causado división han dicho que si nos apartamos de ellos, no somos la iglesia ni tenemos la unidad. Ellos han venido socavando el recobro del Señor y causando divisiones; sin embargo, esperan que la iglesia los incluya. No obstante, nosotros debemos ser osados y declarar que no podemos tolerar la división. No podemos permitir que los que causan división continúen en la comunión de la iglesia. No debemos pensar que la iglesia deba incluir a los que causan división. Es cierto que la iglesia incluye a todos los creyentes, pero no a los que causan división.

Después que Pablo habla de los que causan divisiones y tropiezos, dice: “Porque tales personas no sirven a nuestro Señor Cristo, sino a sus propios vientres, y con suaves palabras y lisonjas engañan los corazones de los ingenuos” (16:18). La palabra griega traducida “vientre” es un derivado de la palabra que significa “vacío”. Se refiere al estómago o bien a toda la cavidad abdominal. Los que causan divisiones tienen un vacío, una cavidad, en su interior, que no ha sido llenada. Así que ellos, en su codicia y ambición, desean llenar este vacío. Tales personas no sirven al Señor ni tampoco les importa el recobro del Señor. En lugar de ello, lo único que les importa es llenar el vacío que tienen en su interior. A ellos no les importan los santos, ni las iglesias, ni el recobro ni el testimonio del Señor. Nosotros, en cambio, somos esclavos del Señor y estamos aquí únicamente por causa del recobro del Señor. Sin embargo, recientemente ha habido algunos entre nosotros que no mostraron ninguna preocupación por el recobro ni por las iglesias, sino únicamente por llenar su propio ser interior.

Romanos 16:18 dice que los que sirven a sus propios vientres, y no al Señor Jesucristo, engañan los corazones de los ingenuos con suaves palabras y lisonjas. En estos días muchos hermanos ingenuos han sido engañados por lisonjas y promesas.

DESECHAR A LOS SECTARIOS

Tito 3:10 y 11 es otro pasaje de la Palabra que trata con los que causan divisiones. Según el griego, el versículo 10 dice: “Al hombre que cause disensiones, después de una y otra amonestación deséchalo”. Un hombre que causa disensiones es alguien que causa divisiones. Tales personas deben ser rechazadas después de una y otra amonestación. Desechar aquí significa “evitar, rechazar”.

El versículo 11 dice: “Sabiendo que el tal se ha pervertido, y peca y está condenado por su propio juicio”. Esto indica que la conciencia de los que causan disensiones no está completamente insensible. Al contrario, su conciencia los culpa de haber obrado mal, de haber obrado contra Dios. En lo profundo de su ser, ellos saben que son divisivos. Por esta razón, son condenados por su propio juicio.

Romanos 16 y Tito 3 coinciden exactamente con la situación actual. Debido a que no podemos tolerar la división, debemos fijarnos en los que causan divisiones y desechar a los que causan disensiones.

En 1 Corintios 5 vemos cómo es echado fuera un hermano pecaminoso. La iglesia sencillamente no puede tolerar a un hermano pecaminoso como el que se describe en este capítulo.

Estos cuatro pasajes de la Palabra confirman el hecho de que la iglesia debe mantener su posición santificada. La iglesia no puede tolerar nada que pueda causar división o contaminación. ¡Cuánto le agradecemos al Señor por la palabra santificadora, el Espíritu santificador, el Dios santificador y la verdad santificadora! La palabra de verdad está continuamente combatiendo los factores de división presentes en nosotros. La mundanalidad, la ambición, la autoexaltación y las opiniones y conceptos están siendo exterminados a fin de que podamos mantener la unidad genuina. Espero que todos veamos esto, nos ejercitemos en oración en cuanto a ello, lo experimentemos y lo practiquemos.


Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.

Back to Top