Resultado de la dispensación de la Trinidad procesada y la transmisión del Cristo que lo transciende todo, Elpor Witness Lee
ISBN: 978-0-87083-788-3
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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He hablado de la iglesia muchas veces durante los últimos sesenta años. Cuando empecé a hablar de la iglesia, la norma estaba muy baja, pero gracias a Dios que lo que he dicho acerca de la iglesia ha sido más elevado. Necesitamos ver qué es la iglesia. Los mensajes de este libro están en un nivel más elevado porque revelan que la iglesia es el resultado del dispensar de la Trinidad procesada y la trasmisión del Cristo que todo lo trascendió. La iglesia es el producto de Dios. Cuando Dios produce algo, El llega a ser la iglesia. La iglesia es el excedente de Dios.
Todos debemos ser impresionados con la revelación de la iglesia en el himno #218. Escribí este himno en 1963. En aquellos días me di cuenta de que había una escasez de himnos en cuanto a las verdades profundas. El himno dice:
Debemos prestar mucha atención a la estrofa 4 de este himno. Esta estrofa revela que la iglesia es la reproducción de Dios, Su Cuerpo, Su novia, Su expresión, Su plenitud, Su continuación, el aumento de Su vida, Su propagación y Su excedente. Tal vez hayamos cantado este himno muchas veces sin recibir ninguna impresión de su significado. La estrofa 4 del himno #218 nos dice lo que es la iglesia. ¿Hemos considerado que como la iglesia somos la reproducción, la continuación y el excedente de Dios? Debemos orar así: “Señor, dame un espíritu de sabiduría y de revelación para cantar tal cántico”. Necesitamos leer y cantar este cántico con oración hasta que verdaderamente veamos lo que es la iglesia en el significado más elevado. ¡La iglesia es la reproducción de Dios!
Mi carga no consiste meramente en enseñar acerca de la Biblia sino en presentar una escena para que veamos en verdad lo que la iglesia es. La visión de la iglesia durante muchos siglos ha sido oscurecida en gran manera. Los que no ven nada dicen que la iglesia es un edificio. La asamblea de Hermanos afirmó que la iglesia no es un edificio sino la congregación de los llamados de Dios. Esto concuerda con lo que denota la palabra griega ekklesía. Pero de todos modos, esto no es el significado intrínseco de la iglesia. El significado intrínseco de la iglesia, según todo el Nuevo Testamento, es que la iglesia es la reproducción de Dios, Su continuación, Su aumento y Su excedente. Debemos proclamar: “¡Somos la reproducción de Dios! ¡Somos la continuación de Dios! ¡Somos el aumento de Dios! ¡Somos el excedente de Dios!” Quizás podamos decir que somos la expresión de Dios, pero ¿alguna vez hemos considerado que somos la continuación de Dios?
Tal vez usted se pregunte dónde aprendí todas estas cosas. Hace años el hermano Watchman Nee me dijo cara a cara que nosotros, la iglesia, somos la duplicación de Dios, Su reproducción y Su continuación. Sin nosotros, Dios no tiene continuación. El hermano Nee también me dijo que somos el aumento de Dios, así que somos Su excedente. Esta visión elevada de la iglesia requiere que oremos: “Señor, danos un espíritu de sabiduría y de revelación para que veamos y sepamos lo que Tu iglesia es”. Tal vez hayamos oído que la iglesia es el Cuerpo de Cristo, el cual expresa a Dios. Pero todavía no conoceremos el significado intrínseco de esto sino hasta que veamos que la iglesia es la reproducción de Dios. La iglesia es la fotocopia de Dios.
¿Cómo puede ser la iglesia la reproducción de Dios, Su continuación? ¿Cómo puede ser el aumento y el excedente de Dios? La iglesia puede ser todas estas cosas por el dispensar divino de la Trinidad Divina y por la trasmisión celestial del Cristo que todo lo trasciende. No debemos decir que la trasmisión equivale al dispensar. Esto no es correcto. Pero podemos decir que la trasmisión abarca, o sea incluye el dispensar. Debemos recibir una profunda impresión de que la trasmisión es crucial pero que no es tan básica como es el dispensar. El dispensar del Padre, del Hijo y del Espíritu son muy básicos. Por el dispensar triuno, mediante éste y con el mismo, muchos hijos de Dios son producidos y transformados en un tesoro, y llegan a ser la herencia de Dios, Su posesión personal y especial. Además, la consumación del Dios Triuno procesado como el Espíritu compuesto y todo-inclusivo que mora en nosotros sella esta herencia de Dios. Este sello no se da de una vez y para siempre, sino que se sigue dando y se extiende para saturar y empapar todos los hijos regenerados y los tesoros transformados para hacerlos Dios en vida y naturaleza, pero no en Deidad.
Hasta ahora, hemos tenido sólo la producción de los materiales, los componentes, los constituyentes, para constituir el Cuerpo de Cristo. Tenemos los materiales, pero la formación todavía no se ha llevado a cabo. Así que es necesaria la trasmisión del Cristo que todo lo trasciende desde los cielos, a ellos y con ellos. La iglesia fue formada por la trasmisión del Cristo que todo lo trasciende desde los cielos, en ellos y con ellos. Esto es maravilloso.
En cuanto a Cristo y la iglesia, tenemos tres cosas maravillosas: la encarnación, la resurrección y Pentecostés. En la encarnación el propio Dios se hizo hombre, y este hombre en resurrección llegó a ser Espíritu vivificante. El día de Pentecostés algo maravilloso ocurrió en el universo. Sopló un viento recio (Hch. 2:2), y la iglesia fue formada. Dios se hizo hombre, este hombre fue hecho Espíritu vivificante y este Espíritu vivificante produjo la iglesia, la constitución del Cuerpo de Cristo. Ahora tenemos un Salvador, tenemos un Espíritu consumado y todo-inclusivo, quien es la realidad de Cristo, y este Cristo es la propia corporificación del Dios Triuno. Finalmente, el día de Pentecostés, se derramó sobre todos Sus componentes para hacer de ellos una sola iglesia, un solo Cuerpo. Necesitamos un espíritu de sabiduría para entender todo esto, y necesitamos un espíritu de revelación para verlo.
Queridos santos, la iglesia es el organismo del Dios Triuno. No es una organización, sino un organismo, y este organismo es el Cuerpo orgánico de Cristo. Un atril de madera es una organización porque es meramente la composición de materiales inertes. Pero nuestro cuerpo es orgánico; está lleno de vida. La iglesia no es una organización ni es inorgánica como un “robot”. La iglesia es el Cuerpo orgánico de Cristo.
La iglesia también es la casa de Dios. Esto significa que la iglesia es la familia de Dios (Ef. 2:19). Esto se revela plenamente en 1 Timoteo 3:15, cuando Pablo le dijo a Timoteo que la iglesia es la casa del Dios viviente. Tal iglesia como casa de Dios, como familia de Dios, es la manifestación de Dios en la carne (v. 16). La iglesia no sólo es la casa como familia, sino también la casa como hogar. Dios tiene una familia en esta tierra, y no carece de hogar. Su familia es Su hogar. El mora en usted, El mora en mí y El mora en todos nosotros los hijos de Dios.
Efesios 2:22 nos dice que El hace Su morada en nuestro espíritu. El espíritu de sabiduría y el espíritu de revelación con el tiempo llegan a ser la morada de Dios. La iglesia es el hogar permanente de Dios en esta tierra, no un motel o alojamiento temporal. El día de Pentecostés ocurrió algo maravilloso. En todo el universo Dios adquirió una morada. ¡Qué maravilloso que actualmente en la tierra Dios tiene una morada, un hogar! Hace cincuenta o sesenta años he enseñado a los santos en cuanto a la iglesia. Les decía varias cosas de la iglesia, pero si hoy me piden que hable de esos asuntos, no tengo la carga. Mi carga actual es decirles que la iglesia es la morada de Dios.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.