Principios básicos en cuanto al ancianatopor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-4731-0
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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Todos debemos asumir la responsabilidad de orar pidiendo que el Señor levante más hermanos que participen en el ministerio, de modo que cada región reciba el cuidado que necesita. Los hermanos que ahora están llevando el ministerio necesitan orar, buscando la dirección del Señor con respecto a cuál región deben cuidar. Los hermanos que llevan el ministerio deben cuidar de varias iglesias. Deben permitir que los ancianos lleven la carga de la edificación local a fin de poder dedicar más tiempo para ministrar a todas las iglesias de una región. Esto no es algo insignificante. Debemos orar pidiendo que la situación del ministerio en cada región sea normal, pero no debemos hacer nada en nosotros mismos con la intención de cambiar la situación. Ninguna mano humana puede hacer que la situación sea normal. Por lo tanto, debemos orar mucho por nosotros mismos y por otros. Ésta es nuestra necesidad práctica y urgente.
Siento la carga de ayudar a las iglesias en el sur de California mientras vivo en Anaheim, pero mi carga principal es liberar los Estudios-vida. También siento la carga de visitar a las iglesias en los Estados Unidos y Canadá. Muchas iglesias en otros países me han invitado para que las visite, pero pese a lo mucho que deseo ayudarlas, debido a la situación práctica, siento que por el momento el Señor no me está guiando a que yo viaje al exterior. Siento que debo dejar la responsabilidad del ministerio en otros países en manos de otros, quienes puedan cuidar de los santos allí con la ayuda de los mensajes del Estudio-vida. Esto ya ha venido sucediendo y está funcionando bien. Debido a que todavía siento que Estados Unidos es un país estratégico para el recobro del Señor sobre la tierra hoy, siento la carga de fortalecer las iglesias de aquí. Sin embargo, mi carga principal es liberar la palabra, esto es, acabar los Estudios-vida de los libros del Nuevo Testamento junto con la Versión Recobro del Nuevo Testamento. Asimismo siento la carga —y les pido a los santos que oren por esto— de que el Señor me conceda el tiempo necesario para terminar los Estudios-vida del Pentateuco. Si logro terminar estos dos juegos del Estudio-vida, mi carga actual será liberada, y estas publicaciones serán un rico suministro para todas las iglesias que están sobre la tierra.
Pregunta: En nuestra iglesia local dos santos que fueron envenenados y se marcharon en la pasada tormenta han expresado su deseo de volver a las reuniones y han tenido comunión con la iglesia. Sin embargo, hay indicios de que todavía no quieren recibir el ministerio. ¿Cómo debemos tratar este asunto como hermanos que toman la delantera?
Respuesta: Los hermanos que toman la delantera primero tienen que dejar claro a dichos santos que no existen términos ni condiciones para venir a la vida de iglesia. Todos los que son salvos son miembros de la iglesia, y mientras no estén viviendo en pecado, pueden reunirse con la iglesia. Recibir el ministerio no es una condición para que alguien pueda estar en la vida de iglesia. Este concepto sutil puede dañar el apetito de los santos por el ministerio.
Pregunta: Si una iglesia local necesita que un anciano sirva de tiempo completo, pero no cuenta con los medios para sostenerlo, ¿debe pedir ayuda económica a otras iglesias?
Respuesta: Debemos ver claramente que los ancianos son locales. Si hay necesidad y se tiene la carga de que un anciano sirva a la iglesia de tiempo completo, el anciano y la iglesia deben orar mucho para ver si ésta es la dirección del Señor. El sostenimiento económico para un servidor de tiempo completo depende de cómo el Señor nos guíe y de nuestra fe. Hacer arreglos con otras iglesias a fin de garantizar la ayuda económica para ese hermano es en cierto modo algo organizativo. Si el Señor nos dirige a hacer algo, Él también enviará el suministro para atender las necesidades. Por lo tanto, debemos aprender a buscar la dirección del Señor y a ejercitar nuestra fe.
Pregunta: En cierta isla de habla hispana se estableció la primera iglesia local hace cuatro años. Algunos vinieron y nos dijeron que debido a que el “fluir” de las iglesias era en inglés, teníamos que hacerlo todo en inglés. Como resultado, muchos de los buscadores que hablaban únicamente español y habían venido, se fueron poco tiempo después. Después que los que insistían en el idioma inglés se marcharon, el Señor puso en nosotros la carga de empezar a usar el idioma español, y la iglesia ha venido creciendo grandemente. ¿Podría usted decir algo en cuanto a la uniformidad entre las iglesias?
Respuesta: Debemos aprender la lección básica de nunca tratar de obligar a que se tenga una uniformidad externa entre las iglesias. Es posible que practiquemos el orar-leer y nos beneficiemos de ello, pero si visitamos una iglesia que no practica el orar-leer, no debemos hablar de ello. Es más provechoso simplemente reunirnos con ellos a su manera y tener una comunión placentera. La comunión requiere de la participación de ambas partes. De nuestra parte, no debemos insistir en orar-leer, y de parte de ellos, si saben que nosotros practicamos el orar-leer, deben abrirse a nosotros con una actitud que manifieste el deseo de aprender. Ninguna de ambas partes debe sentirse descontenta; ambas deben recibir y abrirse la una a la otra, y nadie debe insistir ni ofenderse ni tropezar. Éste es un principio básico de la comunión.
Según el mismo principio, si vivimos en una localidad en la que algunos santos no están de acuerdo con la práctica de orar-leer, no debemos insistir en orar-leer en las reuniones. Más bien, debemos orar-leer únicamente cuando estemos a solas o en nuestra vida familiar. A fin de mantener la comunión, no debemos insistir en esto. Podemos y debemos tener comunión con otros que tienen diferentes prácticas externas. Cuando visitemos otra localidad, debemos proceder de la misma manera que ellos a fin de mantener la comunión con ellos. Debemos aprender a recibir a los demás y a abrirnos a ellos. Sin embargo, si visitamos otra localidad y aprendemos algo de ellos, no debemos insistir en nada nuevo cuando regresemos a nuestra localidad. Esto es interferir y puede causar daño a las iglesias en el recobro del Señor.
Debemos aprender a mantener una comunión placentera al no tratar de cambiar las diferencias que hay entre las iglesias. En tanto que un grupo de creyentes sea una iglesia local genuina, con eso basta. Por supuesto, no podemos tolerar la idolatría ni la inmoralidad, pero tampoco debemos condenar cosas que no sean pecaminosas a los ojos del Señor. Debemos respetar cada iglesia local y darle a cada iglesia plena libertad, a fin de que podamos tener comunión. No ayudamos a los demás corrigiéndolos, sino ministrándoles la vida. Corregir a otros no es vida. Incluso si visitamos una iglesia que es mundana, solamente debemos ministrarle vida. La vida ayudará a los santos abandonar su mundanalidad. Es completamente equivocado esperar que todas las iglesias sean uniformes. Esto, además de causar muchos problemas, no corresponde a los principios hallados en la Biblia. Debemos visitar otras iglesias locales, sin interferir ni corregir nada, sino únicamente tener comunión y ministrar la vida. Esto ayudará a las iglesias a avanzar en una condición pacífica.
Entre las iglesias no debe haber una coordinación inapropiada que abra la puerta a la organización jerárquica y a que algunos asuman la posición de ser cabeza. La coordinación a menudo implica organización y actividades. Es normal el que las iglesias tengan comunión, pero coordinar de tal modo que se cree una organización con las iglesias vecinas es una actividad inapropiada. La comunión entre las iglesias y entre los santos es el fluir saludable de la vida; es como el fluir de la sangre en nuestro cuerpo. La comunión apropiada entre los creyentes es siempre provechosa. Asimismo, es normal el que los ancianos de iglesias vecinas se reúnan para tener comunión. Sin embargo, si tales ancianos coordinan, ello puede convertirse en una trampa que hará que las iglesias caigan en un sistema organizativo, lo cual debemos evitar. Todas las iglesias son autónomas y están en el mismo nivel. Si el Señor así nos guía, podemos reunirnos para tener comunión, pero debemos evitar, no sólo entre las iglesias, sino también dentro de cada iglesia local, la organización jerárquica y que los hombres asuman la posición de cabeza.
Pregunta: En cierta región hay un buen número de iglesias que están cerca la una de la otra. Una localidad es más grande que las demás, y las demás se reúnen con la localidad más grande para llevar a cabo ciertas reuniones a fin de recibir el ministerio. Estas iglesias también coordinan en cuanto a la obra con los niños. ¿Éstos serían casos de una coordinación inapropiada?
Respuesta: Si nuestra intención es sencillamente reunirnos para recibir el ministerio, eso está muy bien. La reunión de las iglesias para este propósito permite que el ministerio tenga un mayor impacto. Sin embargo, debemos dejar claro a todos los santos que esa reunión no es para organizar, sino únicamente para ministrar la palabra. En cuanto a la obra con los niños, también depende de nuestra actitud e intención. No debemos ser legalistas en cuanto a la autonomía de las iglesias locales, pero al mismo tiempo debemos tratar de evitar la organización y que los hombres tomen la posición de cabeza. En áreas donde varias localidades están cerca unas de otras, las iglesias deben reunirse algunas veces, pero debemos practicar esto de una manera apropiada. La relación normal entre las iglesias es una de comunión en la cual todas las iglesias son autónomas y se respetan mutuamente.
Oración: Señor, te adoramos por Tu misericordia y por Tu gracia. Te damos gracias porque debido a Tu misericordia y gracia estamos en Tu recobro. Señor, hemos aprendido que aparte de Tu misericordia y gracia no podemos confiar en nada. Tu misericordia y gracia es todo lo que necesitamos. Señor, te damos gracias porque Tú tienes misericordia en quien deseas tener misericordia. Te pedimos que tengas más misericordia de nosotros. Tu misericordia es lo que nos ha guardado y Tu misericordia nos llevará adelante y nos hará crecer en vida.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.