Llevar fruto que permanece, tomo 1por Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-6314-3
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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En todo nuestro servicio necesitamos aprender a no tener opiniones. A quienes les encanta hablar y expresar muchas opiniones por lo general no laboran mucho. Los que verdaderamente laboran no hablan mucho ni tienen opiniones. Los más competentes entre los colaboradores generalmente no tienen opiniones. Ellos simplemente hacen lo que se decide en comunión. Los más callados son por lo general los que más laboran, y los más locuaces por lo general no laboran. Podemos poner como ejemplo la impresión de Lecciones de vida. Las últimas palabras terminaron de escribirse hace poco un viernes a las 9:05 p. m. Luego las hermanas servidoras inmediatamente empezaron a laborar. Unas mecanografiaron y otras se encargaron de la corrección de pruebas. Laboraron hasta las 2:00 a. m. porque el manuscrito tenía que estar listo el sábado por la mañana para el procesamiento de imagen, la diagramación y la impresión, a fin de que el libro pudiera estar listo para el siguiente lunes. Ésa fue una buena coordinación. Las hermanas servidoras no expresaron ninguna opinión. Cada una de ellas laboró silenciosa y diligentemente sin dar opiniones, y se ciñeron completamente a las instrucciones dadas. Especialmente en el paso de corrección de pruebas, las hermanas prestaron mucha atención al uso y selección de palabras del manuscrito que les entregué. Todas ellas laboraron conforme a las instrucciones sin expresar ninguna opinión.
En teoría “todos los caminos conducen a Roma”; no existe un solo camino. Sin embargo, si todos tienen algo que decir, y si todos dan sus opiniones, jamás podremos “llegar a Roma”. En la cultura de los Estados Unidos, se respeta a la persona que conduce el automóvil. El que tiene el timón en sus manos es el que conduce y los demás que están en el auto no deben hablar. Esto hace que sea más fácil llegar al lugar de destino. Si alguien no deja de expresar sus opiniones ni de discutir, eso sólo desperdiciará el tiempo. Por lo tanto, debemos aprender a laborar sin dar opiniones. Aunque sepamos que las direcciones que se dan no son totalmente correctas, el “timón” no está en nuestras manos y, por tanto, debemos permanecer callados. De este modo, aunque al final tengamos que dar más vueltas, silenciosamente seguiremos al “conductor”. De este modo, experimentaremos que todo está en las manos soberanas del Señor. Él nunca nos falla.
Los hermanos competentes no hablan mucho, mientras que los que constantemente expresan sus opiniones no laboran mucho. Éste es un principio inalterable. Los que laboran saben que hay diferentes maneras de hacer las cosas; por ello, no es necesario insistir en cierta manera ni hay necesidad de invertir tanto tiempo en estudiar cómo hacer las cosas. Por ejemplo, si queremos ir a Yang-ming Shan, quizás algunos se sienten a discutir cuál vía es la mas corta. Como resultado, discuten por más de media hora antes de partir. Pero los que laboran fielmente irán allí inmediatamente y llegarán en diez minutos, o cuando mucho en veinte minutos. Todo lo que necesitamos hacer es “conducir el auto” y llegar allí. Desde el comienzo, muchos jóvenes entre nosotros que sirven a tiempo completo necesitan aprender la lección de no tener opiniones y de no dar ninguna opinión. Ésta es la actitud correcta.
A fin de perfeccionar una reunión de hogar, primeramente debemos aprender a cantar los himnos. Nosotros mismos debemos familiarizarnos con la melodía de un himno particular y cantarlo bien antes de enseñarlo a otros. Si hay niños en los hogares, debemos animarlos a cantar con nosotros porque ellos son quienes más rápido los aprenden. Después de escuchar los himnos, los niños empezarán a tararearlos, y los aprenderán rápidamente. Ellos verdaderamente son las personas con quienes contamos para empezar a cantar y dirigir los cánticos en la casa. Una vez que ellos hayan aprendido los himnos, podrán dirigir a los demás a cantarlos. Para las personas de edad no es fácil aprender a cantar los himnos. Por lo tanto, cuando conduzcamos una reunión de hogar, debemos animar a los niños a cantar y pedirles a ellos que dirijan los cánticos. Esto es muy necesario.
Aunque Lecciones de vida tiene su propia secuencia de lecciones, no tenemos que seguir rígidamente la secuencia cuando usemos este libro. Podemos escoger cualquier tema. El principio es que lo que escojamos debe basarse en nuestro conocimiento de ese hogar determinado y de sus necesidades prácticas. Sin embargo, hay algunas lecciones que no debemos dejar de enseñar, como por ejemplo “Conocer la iglesia”. Creo que todos los que dirigimos una reunión de hogar sentimos la necesidad de enseñar esta lección. Básicamente, debemos aprender bien cada lección.
A fin de usar Lecciones de vida apropiadamente, necesitamos saber la manera en que el libro ha sido compilado. En primer lugar, la lectura bíblica en cada lección es muy rica. La Escritura como base es la característica principal de este libro y la parte más rica. En segundo lugar, la explicación de los versículos es muy sencilla. Es mejor ser sencillos. Debido a que la explicación es sencilla, les es fácil a los nuevos creyentes entender, pero al mismo tiempo tiene un significado crucial y ciertos puntos importantes. Antes de ir a conducir una reunión de hogar, es mejor que estudiemos una o dos lecciones. No sólo necesitamos estudiar los versículos a fondo, sino también entender los puntos principales en la explicación. De este modo, podremos entender el libro completamente. Además, ninguna lección es de más de seis páginas; incluso algunas lecciones sólo son de tres páginas. En promedio, las lecciones constan de cuatro o cinco páginas. Así que, la cantidad de páginas de cada lección es la perfecta. Además, al final de cada lección hay un himno. Esto sería de forma resumida la manera en que se ha compilado este libro. Es recomendable que sigamos estos pasos cuando lo usemos.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.