Revelación y visión de Dios, Lapor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-8827-6
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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He recomendado que ustedes lean el libro En cuanto a la persona de Cristo. Aunque sólo se trata de un folleto, su análisis es muy amplio. Muestra tanto las interpretaciones erradas como el conocimiento apropiado que el hombre ha manifestado durante los siglos en cuanto a la Persona de Cristo, y también cita numerosos versículos de las Escrituras. Realmente vale la pena que lo lean. Los asuntos que abarca no son mis propias enseñanzas; más bien, todos ellos están basados en la Biblia, con un extracto de los versículos pertinentes. Deben leer este libro cuidadosamente. Por ejemplo, en el Antiguo Testamento, una de las designaciones del Señor Jesús es “Renuevo”. Como Renuevo de David (Jer. 23:5; 33:15; Zac. 3:8; 6:12), Él brotó de David. Y como Renuevo de Jehová (Is. 4:2), brotó de Dios. Esto indica que como Renuevo, Cristo tiene dos orígenes: un origen es David, el origen humano; Su otro origen es Dios, el origen divino. Todas estas cosas están en la Biblia y requiere un estudio meticuloso de parte de ustedes. Yo ya realicé la obra de fundamento en estos asuntos, y todos ellos aparecen en el folleto titulado En cuanto a la persona de Cristo.
Su entrenamiento aquí puede compararse con una escuela de posgrado. El catedrático no necesita decir mucho; uno sólo tiene que estudiar por sí mismo concienzudamente conforme a la guía de lectura, y si es necesario, el catedrático le guiará un poco. Además, no es necesario ir a una “biblioteca” muy lejana. La “biblioteca” que está en nuestro medio es muy conveniente. Mientras estén dispuestos a invertir su tiempo y su energía, podrán asimilar todas estas cosas. Espero que todos los hermanos y hermanas jóvenes que tienen el deseo de servir al Señor a tiempo completo permanentemente puedan aprender un bosquejo inicial de la verdad en un periodo corto de unos cuantos meses. Al menos deben aprender y conocer los libros que pueden tomar para encontrar el material que necesitan. Esto no quiere decir que estarán plenamente entrenados después de cuatro meses. Todavía tienen un largo camino que recorrer, y hay demasiadas cosas que necesitan estudiar. Lo que yo espero es que después de cuatro meses su campo de visión sea más amplio para que conozcan un poco acerca de la manera y sepan al menos a dónde acudir a fin de hallar los materiales apropiados. Por tanto, en estos cuatro meses estoy tratando de guiarlos sólo hasta donde inicia el camino. Pero si éste será o no una vía libre que los lleve al éxito rotundo, depende de la manera en que sigan adelante por su propia cuenta. Deben continuar aprendiendo más y más.
En este capítulo veremos el segundo punto de la visión, el cual es la economía de Dios. En los últimos diez años, aproximadamente, hemos liberado muchos mensajes y publicado un buen número de libros acerca de este tema. Si realmente tienen interés, deberían invertir un tiempo para estudiar esos libros. Los bosquejos que les doy en este entrenamiento sólo sirven como guía, a fin de que conozcan qué ruta deben tomar para conocer la economía de Dios. Deben dedicar más tiempo para escavar y encontrar el resto de las riquezas.
Hay más de trescientos pasajes en la Biblia que aluden a la economía de Dios, ya sea directa o indirectamente. En este capítulo mencionaremos sólo tres pasajes: Efesios 1:9-11, 3:9-11 y 1 Timoteo 1:3-4. Lo que se menciona primeramente en estos pasajes es el asunto de la “economía”. Efesios 1:10 dice: “Para la economía de la plenitud de los tiempos”; Efesios 3:9 dice: “Y de alumbrar a todos para que vean cuál es la economía del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas”. En 1 Timoteo 1:4 leemos: “La economía de Dios que se funda en la fe”. La palabra griega traducida “economía” en estos tres pasajes es oikonomía, que significa “ley doméstica”; denota “manejo doméstico”, “administración familiar” y, por derivación, “una distribución”, “un plan” o “una economía para la administración”.
Quiero que noten algunos términos del vocabulario usado en Efesios 1:9-11 y 3:9-11, tales como voluntad, beneplácito, economía (o, distribución, plan) y propósito eterno, todos los cuales están incluidos en el asunto referente a la economía de Dios; esto indica que lo que está implícito en la economía de Dios es sumamente rico.
La palabra griega oikonomía se compone de dos vocablos: óikos, que denota “casa” o “familia”, y nómos, que denota “ley” o “principio”. El significado de estos dos vocablos juntos es “administración familiar”. Esta casa es la casa de Dios, la cual incluye a todos los que son salvos en todo el linaje humano, todos los que fueron escogidos por Dios y han recibido a Dios como su vida (Ef. 2:19). Ellos son un grupo de personas que llegaron a ser la nueva creación al recibir la vida de Dios mediante la selección de Dios. Son la gran familia de Dios. Además, en esta gran familia nosotros somos los amos y todos los ángeles son los sirvientes que nos atienden, ministrando a nosotros los herederos de tan grande salvación (He. 1:14).
En esta casa universal, se necesita una administración familiar para poder alcanzar un propósito específico. Siempre que hay una administración familiar, se necesita tener una distribución y un plan. Esto no es un asunto insignificante. Junto con la administración familiar, debe haber una distribución; en la distribución, se necesita un plan. De manera que, cuando Dios hace Su distribución, Él designa un número de procedimientos administrativos para el cumplimiento de Su economía. Por esta razón, oikonomía puede también traducirse “dispensación”, que quiere decir “arreglo” o “plan”, en referencia al plan que Dios tiene para llevar a cabo Su administración. En la administración de Dios, el plan de Dios, hay muchas dispensaciones y muchas maneras de proceder.
Al final del siglo pasado, los que estudian la Biblia encontraron a partir de las Escrituras las llamadas siete dispensaciones. De hecho, estas siete dispensaciones no son siete eras, sino siete procedimientos administrativos de Dios. En cada procedimiento Dios tiene una manera diferente para tratar con el hombre. Por ejemplo, en la era del Antiguo Testamento, después de los tiempos de Moisés, la manera en que Dios trató con el hombre era según la ley; por tanto, ésa fue “la dispensación de la ley”. En la era neotestamentaria, Dios efectúa Su administración según la gracia y trata con el hombre según la gracia; por tanto, se le llama “la dispensación de la gracia”. En el reino milenario, Dios tomará el reino como Su administración y como Su manera de tratar con el hombre; por tanto, es llamada “la dispensación del reino”. Por consiguiente, la palabra dispensación no denota una era; denota un plan, un arreglo, un procedimiento. En todas las dispensaciones y planes hay muchos procedimientos administrativos. Esto en cierto modo explica el significado de la economía de Dios.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.