Living Stream Ministry

II. LAS PÉRDIDAS SUFRIDAS
POR NO PRACTICAR EL PROFETIZAR

Hemos visto los beneficios de la práctica de profetizar. Ahora veamos las pérdidas que se sufren por no practicar el profetizar.

A. Se enfría el interés de los creyentes
por el servicio del Señor

No practicar el profetizar enfría el interés de los creyentes por el servicio del Señor. Temo a las reuniones en las que sólo unos cuantos hablan. Dicha reunión dispersará la audiencia. Aquellos que vengan a una reunión de silencio, se desanimarán y no querrán volver a las reuniones. Esto se debe a que el silencio los enfría. El silencio enfría, pero el hablar siempre estimula.

B. Anula la capacidad que los creyentes
tienen en la vida divina

La práctica de que un solo hombre hable y los demás escuchen ha anulado la capacidad que los creyentes tienen en la vida divina. Cada vida tiene una capacidad. Todos los creyentes tienen la vida divina, pero si no hablan, su capacidad no será desarrollada. Ésta es la razón por la cual la situación de hoy es tan pobre.

C. Sepulta la función espiritual
de los creyentes,
empobreciendo así el servicio de la iglesia
para el Señor en la economía del Señor

No practicar el profetizar también sepulta la función espiritual de los creyentes. Esto hace que el servicio de la iglesia para el Señor sea pobre en la economía del Señor.

D. Los creyentes quedan sin edificación,
escasos de crecimiento y en la ignorancia

Otra pérdida de no practicar el profetizar es que los creyentes quedan sin edificación, escasos de crecimiento y en la ignorancia. Cuando los hijos son criados, ellos necesitan hablar todo el tiempo. De no ser así, no se desarrollarían y se quedarían en la ignorancia. Sin la práctica de hablar, no hay crecimiento. Pero cuanto más hablan los niños, más aprenden y más son instruidos por sus padres.

E. Estorba y derriba la edificación
del Cuerpo de Cristo
que se lleva a cabo con los creyentes

La edificación del Cuerpo de Cristo se lleva a cabo con los creyentes. Si los creyentes no hablan, es lo mismo que si derribaran el edificio. No hablar estorba y derriba la edificación del Cuerpo de Cristo que se lleva a cabo con los creyentes.

F. Los creyentes quedan desligados
y en individualismo

No participar en el profetizar deja a los creyentes desligados y en individualismo. Cuando veo ciertos hermanos, tengo una profunda preocupación por ellos, ya que permanecen desligados en su individualismo. Ellos vienen a las reuniones semana tras semana, pero se mantienen en su individualismo. Los ancianos no se atreven a tocar a estos hermanos desligados porque se dan cuenta de que son muy frágiles, como un cristal fino, y que pueden quebrarse fácilmente. Como resultado, ellos permanecen en su individualismo intacto. Tal vez se hayan mantenido en su individualismo intacto durante toda su vida. Si usted permanece en su individualismo intacto, usted permanecerá desligado del Cuerpo. La única manera de ser rescatado de esta enfermedad es hablar.

G. Se repite la historia del cristianismo
degradado, en la cual se anula la función
de los miembros de Cristo y se desarrolla
una jerarquía en vez de edificar
el Cuerpo de Cristo

Si nosotros no hablamos, repetimos la historia del cristianismo degradado, en la cual se anula la función de los miembros de Cristo y se desarrolla una jerarquía en vez de edificar el Cuerpo de Cristo. El silencio de los santos puede fomentar la ambición de algunos de edificarse a sí mismos en una clase clerical, una jerarquía. La jerarquía es sencillamente el clero.

Si hablamos, habrá ganancias; si no hablamos, habrá pérdidas. Nuestro hablar por el Señor es un asunto grandioso. Por lo tanto, todos tenemos que aprender a hablar.