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LAS IGLESIAS LOCALES

Más aún, Dios desea edificar a todos estos hijos regenerados de Dios, haciéndolos uno en Cristo. Así que, estos amados no deben ser individualistas, ni deben estar separados ni esparcidos, sino que deben ser reunidos en sus localidades para ser las iglesias locales (Ap. 1:11).

Es posible que pensamos que las iglesias locales son la meta de la economía de Dios. Sin embargo, no son la meta, sino el procedimiento tomado por Dios para alcanzar la meta de Su economía. No debemos olvidar que las iglesias locales no son la meta de Dios. Muchos de los que han sido traídos al recobro aman las iglesias locales por encima de todo, y dan mucho énfasis a la iglesia local. No obstante, no debemos pensar que cuando entramos en la iglesia local alcanzamos la meta de la economía eterna de Dios. No, todavía estamos lejos de la meta de Dios. Desde los tiempos del hermano Nee las iglesias locales han llegado a ser algo precioso en nuestra vida cristiana. Tal vez algunos de los santos se desaniman cuando oyen que las iglesias locales no son la meta de Dios. No obstante, si sólo estamos en las iglesias locales y no avanzamos, quedamos muy lejos de la meta de Dios.

Según Efesios 1:22-23, la meta de la economía eterna de Dios es la iglesia, la cual es el Cuerpo de Cristo. Quizá algunos digan que por ser la iglesia el Cuerpo de Cristo y por estar nosotros en la iglesia, también nosotros debemos de estar en el Cuerpo. Doctrinalmente tienen razón, pero en realidad y en la práctica, no. Podemos hablar mucho del Cuerpo de Cristo, pero si nos preguntan qué es el Cuerpo de Cristo, tal vez sólo podamos responder que el Cuerpo de Cristo es la iglesia. Nosotros estamos en la iglesia; esto es un hecho. Pero, ¿donde está la realidad del Cuerpo de Cristo? Tenemos la expresión el Cuerpo de Cristo y tenemos la doctrina del Cuerpo de Cristo, pero ¿dónde está la práctica y la realidad del Cuerpo de Cristo? ¿Ha tocado usted alguna vez el aspecto práctico del Cuerpo de Cristo? ¿Ha estado alguna vez en la realidad del Cuerpo de Cristo?

Todos necesitamos considerar este asunto. Tenemos la terminología y la doctrina, pero en la práctica, no tenemos la realidad. El propósito de la compenetración es introducirnos a todos nosotros en la realidad del Cuerpo de Cristo. Yo valoro mucho las iglesias locales, igual que ustedes. Pero valoro las iglesias locales por causa de un propósito. Las iglesias locales son el procedimiento que nos introduce en el Cuerpo de Cristo. Las iglesias son el Cuerpo, pero es posible que las iglesias no tengan la realidad del Cuerpo de Cristo. Por tanto, necesitamos estar en las iglesias locales para poder ser introducidos en la realidad del Cuerpo de Cristo.

EL CUERPO UNIVERSAL DE CRISTO

Es fácil conocer la iglesia porque es visible. Pero conocer el Cuerpo de Cristo no es fácil. Hace setenta y cuatro años el Señor llegó a China y levantó al hermano Nee. Este fue salvo cuando era un estudiante joven. Dos años después de ser salvo, publicó algunas obras en las cuales predicaba el evangelio y enseñaba la verdad. Explicó las Escrituras de una manera que asombró aun los mejores misioneros. El hermano Nee primero nos presentó un panorama claro de la obra salvadora de Dios. Los misioneros habían llevado el evangelio a China y lo habían predicado. Damos gracias al Señor por lo que hicieron. Pero la plena salvación de Dios nunca fue revelada de manera clara como una realidad espiritual completa hasta que surgió el hermano Nee.

Después de presentar un panorama claro de la obra salvadora de Dios, el hermano Nee dio un paso más y nos presentó la iglesia. Cuando los misioneros fueron a China, no trajeron la iglesia al pueblo chino. En vez de eso, trajeron sus denominaciones. Los creyentes chinos respetaron las denominaciones porque por medio de éstas habían oído el evangelio y habían sido salvos. Agradecían a las denominaciones. De repente, les sorprendió a los misioneros que un joven autóctono de ahí publicara obras tan claras las cuales decían qué es la iglesia y también afirmaban categóricamente que todas las denominaciones son divisiones de la iglesia, y no la iglesia misma. Así que, el hermano Nee nos reveló claramente las iglesias locales, haciéndolas muy valiosas para nosotros los que éramos atraídos por el Señor a seguirlo según Sus santas Escrituras. Valoramos mucho a las iglesias locales.

Más tarde, el hermano Nee nos llevó más adelante para ver a Cristo como vida para nosotros. Esto fue agradable y precioso para nosotros. Luego en 1939 comenzó a revelarnos el Cuerpo de Cristo. Todos recibimos su ministerio con respecto a la salvación, las iglesias locales, y Cristo como vida para nosotros; pero muy pocos entre nosotros recibieron su ministerio con respecto al Cuerpo de Cristo. No lo rechazamos; simplemente no pudimos entrar en ello. Al hablarnos el hermano Nee en cuanto al Cuerpo de Cristo, era como si estuviera tocando al piano para un grupo de vacas. En aquel entonces oí la expresión el Cuerpo de Cristo y llegué a conocer la doctrina del Cuerpo de Cristo, pero no vi la realidad del Cuerpo. El hermano Nee dio mensaje tras mensaje al respeto de 1939 a 1940, pero en vez de ver nosotros el Cuerpo de Cristo, hubo un gran disturbio entre nosotros que forzó al hermano Nee a detener su ministerio. Por esto pueden ver que no es sencillo entrar en la realidad del Cuerpo de Cristo.

Esta es la razón por la cual, aunque el recobro ha estado en los Estados Unidos por más de treinta y dos años, sólo en años recientes hemos sentido la necesidad de entrar en la realidad del Cuerpo de Cristo. Este es el propósito de la compenetración.