Mensajes para creyentes nuevos: Resistid al diablo #21por Watchman Nee
ISBN: 978-0-7363-0098-8
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
ISBN: 978-0-7363-0098-8
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
Font Size
En 1 Pedro 5:8-9 dice: “Sed sobrios, y velad. Vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe”. La Palabra de Dios nos muestra claramente que resistimos a Satanás por la fe. No hay otra manera de resistirlo. ¿En qué debe reposar nuestra fe? ¿Cómo debemos usar nuestra fe para resistirlo? Examinemos lo que la Palabra de Dios dice al respecto.
En primer lugar debemos creer que el Señor se manifestó, es decir, vino a la tierra, para destruir las obras del diablo (1 Jn. 3:8). El destruía las obras del diablo por donde iba. Por lo general, la obra de Satanás no es muy obvia; él se esconde detrás de fenómenos naturales. Pero el Señor lo reprendió en todos los casos. Sin duda, El estaba reprendiendo a Satanás cuando reprendió a Pedro en Mateo 16:22-23, cuando reprendió la fiebre de la suegra de Pedro en Lucas 4:23 y cuando reprendió al viento y a las olas. Aunque el diablo se escondía detrás de los fenómenos naturales, el Señor Jesús lo reprendió directamente a él. Dondequiera que el Señor iba, el poder del diablo era destruido. Por eso El dijo: “Pero si Yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, entonces ha llegado a vosotros el reino de Dios” (Mt. 12:28). En otras palabras, adondequiera que el Señor iba, Satanás fue echado afuera, y el reino de Dios se manifestaba. Satanás no podía permanecer donde el Señor estaba. Por eso el Señor dijo que El se manifestó para destruir las obras del diablo.
También debemos creer que cuando el Señor se manifestó en la tierra, no solamente destruyó las obras del diablo, sino que también dio autoridad a Sus discípulos para echar fuera demonios en Su nombre. El les dijo: “He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo poder del enemigo” (Lc. 10:19). Después de ascender El dio Su nombre a la iglesia para que ésta continúe Su obra en la tierra. La autoridad que El usó en la tierra para echar fuera demonios la dio a la iglesia.
Debemos distinguir entre lo que tiene el diablo y lo que nosotros tenemos. El diablo tiene poder, pero nosotros tenemos autoridad. El Señor Jesús nos dio la autoridad que puede vencer el poder de Satanás. El poder no prevalece frente a la autoridad. Dios nos dio la autoridad, y sin duda Satanás fracasará.
Usemos un ejemplo para comprender cómo la autoridad está por encima del poder: un semáforo puede controlar el tráfico de un cruce. Cuando la luz roja se enciende, los peatones y automóviles tienen que detenerse. A nadie se le permite cruzar cuando la luz roja se enciende. Los peatones y los autos tienen mucho más poder que el semáforo. Sin embargo, ni los peatones ni los vehículos se atreven a avanzar cuando el semáforo está en rojo, pues éste representa la autoridad. Vemos, entonces, que la autoridad prevalece sobre el poder.
En todo el universo la autoridad está por encima del poder. No importa cuán fuerte sea el poder de Satanás, hay un hecho cierto: el Señor Jesús dio Su nombre a la iglesia. Este nombre representa Su autoridad. La iglesia puede echar fuera demonios en el nombre del Señor. Podemos invocar el nombre del Señor para combatir el poder de Satanás. Agradecemos a Dios porque el nombre del Señor es inmensurablemente mayor que el poder de Satanás. La autoridad que sustenta el nombre del Señor vence el poder de Satanás.
Los discípulos salieron en el nombre del Señor y cuando regresaron contaron que se habían sorprendido. Ellos le dijeron al Señor: “Aun los demonios se nos sujetan en Tu nombre” (Lc. 10:17). El nombre del Señor tiene autoridad. Al darnos Su nombre nos da Su autoridad. El Señor dijo: “He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo poder del enemigo, y nada os dañará” (v. 19). Todo aquel que desee resistir a Satanás debe reconocer la diferencia entre la autoridad del Señor y el poder de Satanás. No importa cuán grande sea el poder de Satanás, la autoridad del Señor lo vence.
Debemos creer que Dios dio Su autoridad a la iglesia, la cual, a su vez, puede echar fuera demonios y resistir al diablo en el nombre del Señor Jesús.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.