Cristo en Su excelenciapor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-3291-0
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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La expresión de Cristo es la expresión de Dios. Debido a que la plenitud de Cristo es la plenitud de Dios mismo, la expresión de Cristo es también la expresión de Dios mismo. En Efesios 3:17-19 dice: “Para que Cristo haga Su hogar en vuestros corazones por medio de la fe, a fin de que ... seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la altura y la profundidad ... para que seáis llenos hasta la medida de toda la plenitud de Dios”. El universo tiene sus dimensiones, mas nadie jamás ha podido medirlas. Cristo es las dimensiones del universo; Él es la anchura, la longitud, la altura y la profundidad del universo.
En nuestra experiencia, primero experimentamos la anchura de Cristo y luego Su longitud; después proseguimos a experimentar en la iglesia la altura y la profundidad de Sus riquezas. Pasamos del aspecto horizontal, la anchura y la longitud, al aspecto vertical, la altura y la profundidad; y así avanzamos de un nivel plano a un cubo. Cuando experimentamos a Cristo junto con los hermanos y hermanas en la iglesia, y juntos comprendemos Sus dimensiones, descubrimos que las riquezas de Cristo son ilimitadas e inmensurables. Es por medio de la abundante suministración del Espíritu vivificante que mora en nosotros que las riquezas de Cristo son constantemente impartidas a nuestro ser, a fin de que seamos empapados y llenos hasta la medida de toda la plenitud de Dios. La plenitud de Dios se refiere a la expresión de las riquezas de lo que Dios es, y ésta hace que seamos la expresión de Dios, que es la iglesia de Cristo.
Efesios 4:11-12 dice: “Y Él mismo dio a unos como apóstoles, a otros como profetas, a otros como evangelistas, a otros como pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del Cuerpo de Cristo”. Estamos aquí a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, la cual no consiste simplemente en predicar el evangelio, enseñar la Biblia o establecer una reunión, sino en edificar el Cuerpo de Cristo. Según la gramática griega, la construcción apositiva de la preposición para, la cual se repite dos veces, no implica que la obra del ministerio y la edificación del Cuerpo sean dos cosas distintas; más bien, se refiere a una misma cosa dicha de dos maneras diferentes. Por tanto, decir “para la obra del ministerio” es lo mismo que decir “para la edificación del Cuerpo de Cristo”. Nuestra obra no consiste solamente en predicar el evangelio, establecer reuniones o enseñarle a la gente las verdades bíblicas; ciertamente todas estas cosas deben ser llevadas a cabo, pero su objetivo es edificar el Cuerpo de Cristo, la iglesia. Toda actividad que no sea para la edificación del Cuerpo de Cristo, es una obra de división y no contribuye para la obra del ministerio. La obra del ministerio tiene una sola meta, la cual es edificar el Cuerpo de Cristo, la iglesia.
El versículo 13 dice: “Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del pleno conocimiento del Hijo de Dios, a un hombre de plena madurez, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”. Este versículo no está hablando de tres diferentes metas a las cuales tenemos que llegar, sino a una sola meta que tiene tres aspectos distintos. El primer aspecto consiste en que tenemos que llegar a la unidad de la fe y del pleno conocimiento del Hijo de Dios. El segundo aspecto es llegar a ser un hombre de plena madurez. Aunque hoy día nosotros conformamos la iglesia, tenemos que confesar que somos inmaduros, que aún no hemos llegado a ser un hombre de plena madurez, pues estamos todavía en el proceso de ser edificados conjuntamente hasta que lleguemos a ser tal hombre de plena madurez. El tercer aspecto es que tenemos que llegar a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo. La plenitud de la estatura es la iglesia. Llegar a ser una iglesia a la estatura de plena madurez es llegar a la estatura de la plenitud de Cristo.
Hasta ahora hemos visto lo que Cristo es en Su excelencia: la incomparabilidad de Cristo, Su trascendencia, Su gloria y Sus riquezas, las cuales tienen una sola meta: Su plenitud, la cual es Su expresión; y esta expresión es la iglesia.
La obra que estamos llevando a cabo es una batalla espiritual, y no estamos como quien golpea el aire en vano, ni estamos como aquellos que corren sin meta definida. Nosotros tenemos la misma meta que tuvieron el apóstol Pablo y todos aquellos que han ministrado a lo largo de los siglos, la cual es edificar el Cuerpo de Cristo. No debemos llevar a cabo ninguna obra que divida el Cuerpo de Cristo. Si predicamos el evangelio, impartimos enseñanzas bíblicas o establecemos reuniones, y esto nos lleva a causar una división en el Cuerpo de Cristo, no debemos hacerlas. Toda nuestra obra debe ser parte de la obra del ministerio, y su meta debe ser edificar el Cuerpo de Cristo.
Tengo la profunda convicción de que este es el camino correcto. Cuanto más avancemos por este camino, más fe tendremos; cuanto más hablemos, más tendremos que decir; y cuanto más prediquemos, mayor será la capacidad y la valentía con la que prediquemos. Al hacer sonar esta trompeta proclamamos lo mismo que proclamó el apóstol Pablo y todos los otros santos que han hecho sonar la misma trompeta a lo largo de los siglos. El sonido de nuestra trompeta es el de la unanimidad. Durante más de veinte años, desde Taiwán hasta los Estados Unidos, hemos hecho sonar esta trompeta y continuaremos haciéndolo sin alterar lo que decimos. Hacemos esto debido a que Cristo en Su excelencia ha llegado a ser todo para nosotros, y lo hacemos para la expresión de Su plenitud: la iglesia. Esta es la meta única de Dios.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.