Llevar fruto que permanece, tomo 2por Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-6315-0
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
ISBN: 978-0-7363-6315-0
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
Font Size
Si verdaderamente hemos recibido esta visión, requeriremos el resto de nuestra vida y más para hablar acerca de ella. En los Estados Unidos algunos nos condenan diciendo que somos panteístas porque decimos que Dios lo es todo. Es cierto que nuestro Dios lo es todo, pero es una falsa acusación que somos panteístas. Sin duda alguna, Jesús es la verdadera naranja y la verdadera manzana, y Él es el mejor bistec. Cristo lo es todo. Él es nuestra comida y nuestra bebida, nuestro comer y nuestro beber. No importa qué bebamos hoy, no estamos satisfechos; es únicamente cuando bebemos a Cristo que nos sentimos verdaderamente satisfechos. Cuando el Señor Jesús predicaba en la tierra, Él a menudo usó muchas cosas como ejemplos de Sí mismo. No había ninguna cosa positiva que Él no pudiera usar como ejemplo. Esto se debe a que Él lo es todo. Éste es un aspecto del misterio. Nuestros ojos necesitan ser abiertos para ver que el misterio que estuvo escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas, no sólo ha sido manifestado a nosotros, sino que además nos ha sido revelado por iluminación.
El recobro del Señor consiste en recobrar la persona de Cristo. El cristianismo de hoy en cierta medida ha adulterado la palabra de Dios, y es por ello que necesitamos tener la capacidad de discernimiento y empeñarnos en conocer el recobro del Señor. A fin de que el Señor pueda regresar, debe haber un fuerte recobro de la persona de Cristo en un grupo de personas. Hoy en día, cuando salimos a tocar a las puertas y visitar a las personas, estamos predicándoles el evangelio de este Cristo. Por esta razón, primeramente debemos estar llenos de Cristo. Debemos creer firmemente que según lo que Dios ha dispuesto en Su soberanía hay hijos de paz. Cuando salgamos a tocar a las puertas, no debemos temer la oposición de los hombres, porque encontraremos a los hijos de paz. Luego, una vez que los encontremos, Cristo es lo que debemos predicarles fielmente.
En la tierra siempre habrá algunos que estarán hambrientos y sedientos, los cuales han sido preparados por el Señor. El evangelio siempre ha estado acompañado de la oposición y, por tanto, no debemos temer esto, sino valernos de todo denuedo. Cuando el apóstol Pablo salió a predicar el evangelio, especialmente cuando estuvo entre los judíos, su predicación siempre produjo dos grupos de personas: los que aceptaban su predicación y los que no la aceptaban y terminaron convirtiéndose en enemigos. Hoy en día, si no podemos producir esta clase de condición cuando guiemos a las personas en todo lugar a seguir al Señor, ello indicará que aún no somos un misterio. Sin embargo, esto no significa que debamos salir a causar problemas y a generar caos. Todo lo contrario, los cristianos somos el grupo de personas más pacífico e inofensivo. Sin embargo, los “microbios” de este misterio en nosotros suscitarán ciertas situaciones.
Únicamente los que han visto esto son apóstoles, profetas, evangelistas y pastores y maestros. En Efesios 4 Pablo habló de estas cuatro categorías de personas. Él mismo era todas estas categorías de personas, es decir, él era un apóstol, un profeta, un evangelista, y sobre todo, un pastor y maestro. Hoy en día, hasta el más joven entre nosotros, si verdaderamente ha visto este “video” del misterio de Cristo, también puede ser un apóstol, un profeta, un evangelista y un pastor y maestro. No llegamos a ser este tipo de personas por medio del estudio teológico, sino al ver este “video” celestial.
Si esta realidad logra forjarse en nuestra constitución intrínseca, ella nos regirá cuando salgamos a predicar el evangelio, a conducir las reuniones de hogar y a llevar a los nuevos creyentes a cantar y a leer la palabra de Dios. En otras palabras, dicha realidad regirá todo nuestro vivir. Como resultado, las personas que guiemos y ayudemos podrán conocer a Cristo de modo subjetivo, y no simplemente de manera doctrinal. Entonces en poco tiempo serán llevadas a la experiencia práctica del Cuerpo de Cristo. Espero que todos prestemos atención a este asunto, oremos por esto y también tengamos mucha comunión al respecto unos con otros.
(Mensaje dado el 10 de junio de 1987 en Taipéi, Taiwán)
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.