Información del libro

Estudio-vida de 1 Corintiospor Witness Lee

ISBN: 978-0-7363-1445-9
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea

    Por favor, utilice Firefox o Safari
Actualmente disponible en: Capítulo 11 de 69 Sección 1 de 4

ESTUDIO-VIDA DE LA PRIMERA
EPISTOLA A LOS CORINTIOS

MENSAJE ONCE

LA PARTICIPACION EN LA COMUNION DE CRISTO

Lectura bíblica: 1 Co. 1:2, 9-13

En los capítulos uno, dos y tres de 1 Corintios Pablo emplea términos especiales y expresiones extraordinarias que no se hallan en ninguna otra parte de sus escritos. El primer versículo extraordinario es 1:2, donde dice: “A la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, los santos llamados, con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro”. La expresión los santos llamados no es común. Muchos cristianos no tienen la certeza de ser santos. ¿Ha alabado al Señor alguna vez por el hecho de que usted es santo? ¿Tiene usted el concepto o la idea de que es santo? Si yo declarara con denuedo que soy santo, tal vez alguien me acusaría de orgulloso, diciéndome que yo soy un simple chino de nacimiento y cristiano por fe. No obstante, Pablo se refiere a los destinatarios de esta epístola como los santos llamados. Esta es una expresión extraordinaria.

En el versículo 2 Pablo también habla de invocar el nombre del Señor Jesucristo en cualquier lugar, y añade que Cristo es Señor de ellos y nuestro. El Cristo cuyo nombre invocamos es tanto de ellos como nuestro. Quizás usted había leído este versículo muchas veces sin prestar atención a esta expresión. El significado de estas palabras es profundo.

En 1:9 Pablo dice: “Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión de Su Hijo, Jesucristo nuestro Señor”. Todo cristiano sabe que Dios es fiel. Además, el hecho de que El es misericordioso, lleno de gracia y amoroso también les es común. Pero son pocos los que están conscientes de que fueron llamados a la comunión del Hijo de Dios, y menos los que tienen el debido entendimiento de ella. La pregunta que casi siempre hacen los cristianos es sí uno ha sido salvo, pero casi nunca indagan si la persona ha sido llamada. ¿Se le ha acercado alguien alguna vez para preguntarle: “Ha sido usted llamado por Dios a la comunión de Su Hijo?” En este versículo Pablo no habla de ser salvo, sino de ser llamado. Además, tampoco dice que hayamos sido llamados al cielo o a las bendiciones eternas; él dice que fuimos llamados a la comunión del Hijo de Dios.

El Cristo a quien invocamos es de ellos y nuestro. El Dios fiel nos llamó a la comunión de Su Hijo, Jesucristo nuestro Señor. Esto es muy profundo. Los cristianos a lo largo de los siglos no han tocado debidamente las profundidades de este tema.

EL BENEPLACITO DE DIOS

Si deseamos entender estos dos versículos, es necesario remontarnos al principio, donde vemos a Dios en la eternidad pasada. Antes de crear el universo, El tuvo un beneplácito, el deseo de Su corazón. Así como todo ser humano busca tener cierta clase de placer, también Dios tiene Su placer. En conformidad con Su beneplácito, Dios hizo un plan, el cual consiste en impartirse en muchos seres humanos y forjarse en ellos. Este es Su beneplácito, Su deleite, sin la comprensión del cual, los cristianos no podrán conocer debidamente el significado de 1 Corintios 1:2 y 9.

Pocos cristianos saben que Dios tiene un placer y que Su plan consiste en impartirse y forjarse en nosotros. No obstante, esto se revela en la Biblia. En Efesios 1:5 Pablo habla del beneplácito de la voluntad de Dios, y en el versículo 9, de Su beneplácito, el cual se había propuesto en Sí mismo. Además, él emplea la palabra economía varias veces. En Efesios 1:10 habla de “la economía de la plenitud de los tiempos”, y en 3:9 se refiere a “la economía del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas”. Repito: el beneplácito de Dios consiste en impartirse y forjarse en nosotros.


Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.

Back to Top