Ejercicio y la práctica de la manera ordenada por Dios, Elpor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-0428-3
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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En este mensaje no es mi intención promover un avivamiento. En más de sesenta años de experiencia cristiana, me he dado cuenta de que tomar el camino de grandes avivamientos no sirve de nada. Lo que sí sirve es la manera ordenada por Dios según se revela en el Nuevo Testamento. La manera ordenada por Dios de predicar el evangelio consiste en que cada creyente sale a visitar a la gente para predicarle el evangelio directa y personalmente. El Nuevo Testamento nos ordena “¡ir!” (Mt. 28:19; Mr. 16:15). Tenemos que acercarnos a la gente, visitándola donde esté. Visitar a las personas para predicarles el evangelio no es sólo tocar a sus puertas; es llegar hasta ellas dondequiera que estén. El Señor Jesús mismo salía para acercarse a las personas (Mt. 4:18-22; 9:9; Jn. 4:1-42), y a los doce también los envió a hacer lo mismo (Lc. 9:1-6). Luego El envió setenta a toda ciudad y lugar para hallar los hogares de los hijos de paz (Lc. 10:1, 4-5). Físicamente, como una sola persona, el Señor no podía ir a muchas aldeas a visitar a tanta gente, así que mandó los setenta a hacer esta labor de visitación.
El principio básico al predicar el evangelio es que uno vaya a la gente; no le pida a la gente que venga a usted. Si usted va a ellos, verá que esto hará una gran diferencia. Vaya a la casa de un pecador a visitarlo. Siéntese con él y converse con él. Tome la iniciativa de orar con él, sugiriéndole que ore con usted. Entonces, usted podría decirle: “Puesto que usted ha orado al Señor Jesús y ha creído en El, usted está ahora en posición de ser bautizado, ahora podemos bautizarlo en su bañera”. Esto es completamente diferente de invitar a la gente a venir a usted. Muchos santos han tenido bastante éxito en la predicación del evangelio siguiendo esta manera ordenada por Dios.
Tenemos que ser flexibles en nuestra forma de ponernos en contacto con la gente en la predicación del evangelio. ¿Qué significa ser flexible? Los seres humanos son muy legalistas. Muy fácilmente convertimos todo en un legalismo. En el entrenamiento de tiempo completo en Taipei, debido a que hay tantos enormes edificios de apartamentos, les dimos instrucciones a los entrenandos de que siempre siguieran hacia el lado izquierdo después de tocar una puerta o de salir de una. En ese tipo de edificio puede haber más de ochenta unidades en cada piso; así que ese tipo de instrucción ayudó a los entrenandos a ser eficientes con el uso de su tiempo. Pero en los Estados Unidos no tenemos tantos edificios de apartamentos de ese tipo. Mucha gente vive en casas unifamiliares. Practicar rígidamente este “voltear siempre a la izquierda” tal vez no ayude mucho en los Estados Unidos puesto que la situación es muy diferente.
La mejor manera en que los santos pueden visitar hogares es formando equipos. Lo ideal sería que un equipo estuviera compuesto de tres personas, uno de edad avanzada, uno joven y uno de mediana edad, donde se tuviera una hermana y dos hermanos, o bien un hermano y dos hermanas. Pero en los Estados Unidos muchos han tomado esto como un legalismo. Debido a que no pueden conseguir un hermano de edad o uno joven, no forman un equipo. En consecuencia, nada se hace debido al legalismo. Todos tenemos que aprender a ser flexibles. Esto no significa que estoy invalidando lo que compartí antes. Si ustedes practican estas cosas, ellas serán de ayuda; pero todo depende de la situación.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.