Estudio-vida de Ezequielpor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-6480-5
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
ISBN: 978-0-7363-6480-5
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
Font Size
El segundo aspecto de la condición práctica de la coordinación es andar conforme al Espíritu (Ez. 1:20). Los seres vivientes siguen al Espíritu. Dondequiera que va el Espíritu, los seres vivientes también van. Esto indica que si nosotros, como seres vivientes en Cristo, hemos de estar en coordinación, tenemos que andar por el Espíritu (Gá. 5:16, 25). No debemos andar siguiéndonos a nosotros mismos. Si nos negamos a nosotros mismos y andamos conforme al espíritu (Ro. 8:4), tendremos la coordinación genuina. Sin embargo, si andamos de manera arbitraria conforme a nuestra propia voluntad y si vivimos en la carne, no podremos coordinar juntos.
Otro aspecto de la condición práctica de la coordinación es que se avanza recto hacia adelante y es necesario acoplarse a los demás. Cuando los seres vivientes avanzan, van recto hacia adelante; no hacen giros. Si un ser viviente toma la delantera para avanzar recto hacia el este, los otros seres vivientes también avanzan en esa dirección. Esto indica que todos desempeñan su función apropiadamente en la coordinación. En la vida de iglesia hoy, todo miembro tiene su propia función (1 Co. 12:14-30) y avanza recto hacia adelante a fin de cumplir con dicha función, sin girar para realizar algo diferente.
Mientras uno de los cuatro seres vivientes avanza hacia adelante en determinada dirección, los otros tres se acoplan a él al avanzar en la misma dirección andando hacia atrás, hacia el costado derecho y hacia el costado izquierdo respectivamente. Únicamente un ser viviente puede avanzar hacia adelante cada vez. Sin embargo, al moverse con él, los demás no giran; más bien, andan hacia atrás o hacia los costados. Así pues, independientemente de la dirección en que los seres vivientes avanzan, uno de ellos avanza hacia adelante, otro hacia atrás y los otros de costado. Por tanto, quienes se mueven hacia atrás y hacia el costado se acoplan a aquel que se mueve hacia adelante.
Ésta debe ser la situación que impere en la vida de iglesia hoy. Con frecuencia tenemos que movernos hacia atrás o hacia el costado a fin de acoplarnos a aquel que se mueve recto hacia adelante. En las reuniones o en el servicio práctico, cuando alguien ejerce su función moviéndose hacia adelante, tenemos que acoplarnos a él, ya sea moviéndonos hacia atrás o hacia el costado. En esto consiste la coordinación.
Sin embargo, si todos van por su propio camino y no se acoplan a los demás, no podremos ser una entidad corporativa ni tampoco podremos coordinar juntos. El mover de los seres vivientes no es individual, sino corporativo. Los seres vivientes se mueven al coordinar juntos. Si hemos de participar en tal coordinación, debemos negarnos a nosotros mismos, experimentar la gracia de Dios y seguir al Espíritu de una manera corporativa.
Creo firmemente que en la Biblia el cuadro más claro acerca de la coordinación se encuentra en Ezequiel 1. Una característica central de la visión de los cuatro seres vivientes es su coordinación. Aquí no vemos el mover de un ser viviente individual, sino el mover corporativo de los cuatro seres vivientes. Esto retrata el mover no de los creyentes individualmente, sino de la iglesia corporativamente. Nosotros, los seres vivientes que estamos en la gracia y el poder de Dios, hemos llegado a ser una sola entidad. Todos tienen su ministerio y desempeñan su función apropiadamente. Esto significa que todos avanzan en la dirección que les corresponde, sin hacer giros. Aunque las direcciones difieran, el mover es el mismo. Cuando alguien avanza de frente en dirección norte, los otros le siguen para moverse en esa dirección. Si otro se mueve en dirección sur, todos los demás se mueven con él en dirección sur. Siempre que alguien se mueve recto hacia adelante, todos los demás se acoplan a él moviéndose hacia atrás o hacia el costado. Si estudiamos el cuadro claro de la coordinación de los seres vivientes en Ezequiel 1, entenderemos qué es la coordinación.
Finalmente, debemos ver los diversos aspectos del resultado de la coordinación.
Primero, la coordinación tiene como resultado la expresión corporativa de Cristo.
Segundo, la coordinación tiene como resultado que quienes coordinan juntos llegan a ser ardientes y llenos de luz. Debido a que son ardientes y resplandecientes, pueden iluminar a los demás.
Otro resultado de la coordinación es el mover de Dios, representado por la gran rueda (vs. 16-19). Cuando los seres vivientes coordinan juntos, aparece la gran rueda. Esto indica que el mover de Dios sigue la coordinación de los cuatro seres vivientes. Si no hay coordinación, no se producirá el mover de la gran rueda.
La coordinación de los cuatro seres vivientes también tiene como resultado la administración de Dios. El trono de la administración divina descansa sobre la coordinación de los seres vivientes. Sin tal coordinación, Dios no tendría los medios para gobernar ni tampoco tendría los medios para expresar Su autoridad y Su gloria.
Un resultado adicional de la coordinación es que se lleva a cabo la voluntad de Dios y Su plan. Debido a la coordinación de los cuatro seres vivientes, es posible que se lleve a cabo la voluntad de Dios y el plan de Dios.
Debe causarnos profunda impresión la importancia crucial que tiene la coordinación. Antes de poder estar juntos en coordinación, es necesario que hayamos experimentado el viento, la nube, el fuego y el electro, con lo cual llegamos a ser los seres vivientes. Después, es necesario que tengamos la imagen de hombre así como las caras de hombre, león, buey y águila. Además, debemos tener las alas de águila, las manos de hombre y los pies de becerro. Si tenemos todas estas cosas, entonces podremos coordinar juntos. Esta coordinación tiene como resultado la expresión corporativa de Cristo, pues llegamos a ser personas ardientes, resplandecientes y llenas de luz que son partícipes del mover de Dios, del gobierno de Dios y del cumplimiento del plan eterno de Dios.
Debemos ver que la coordinación es la clave para entender la visión presentada en Ezequiel 1. Por un lado, muchas cosas son necesarias para la coordinación; por otro, muchas cosas están basadas en la coordinación. La coordinación es la clave. Que todos podamos ver esto y que el Señor pueda introducirnos a todos nosotros en la coordinación con muchos otros seres vivientes por causa de la expresión corporativa de Cristo, el mover de Dios y la administración de Dios.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.