Información del libro

Estudio-vida de Jeremías y Lamentacionespor Witness Lee

ISBN: 978-0-73636366-2
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea

    Por favor, utilice Firefox o Safari
Actualmente disponible en: Jeremías 4 de 40 Capítulo 4 de 44 Sección 2 de 3

EL HOMBRE SE VOLVIÓ INFIEL E IMPURO
Y ABANDONÓ A DIOS POR LOS ÍDOLOS

Dios tenía la intención de impartirse en el hombre como su satisfacción a fin de que Dios fuese agrandado, pero el hombre se volvió infiel e impuro y abandonó a Dios por los ídolos. El hombre comenzó a abandonar a Dios en el huerto del Edén. Eva, la esposa de Adán, no fue fiel a Dios, sino que se dejó seducir por la serpiente para volverse de Dios a Satanás, el cual está simbolizado por el árbol del conocimiento del bien y del mal. Por medio de Eva, Adán también fue seducido y comió del fruto del árbol del conocimiento. De este modo, el hombre se alejó de Dios para volverse a los ídolos. Cada una de las ramas del árbol del conocimiento constituye un ídolo. Todo cuanto poseemos, e incluso todo cuanto somos, puede ser un ídolo. Israel fue malvado e infiel a Dios al abandonar a Dios por los ídolos. En lo referido a ser infieles a Dios de este modo, todos somos iguales a Israel.

LA FIDELIDAD DE DIOS
EN CONDUCIRNOS A SU ECONOMÍA

Aunque somos infieles, Dios es fiel. Lamentaciones 3:23b dice: “Grande es Tu fidelidad”. El coro de un conocido himno sobre la fidelidad de Dios (Hymns, #19) dice: “¡Grande es Tu fidelidad! ¡Grande es Tu fidelidad! / Mañana tras mañana nuevas misericordias veo; / Todo cuanto he necesitado Tu mano ha provisto / ¡Grande es Tu fidelidad, oh Señor, para conmigo!”. Podemos entender lo que la Biblia y este himno dicen sobre la fidelidad de Dios ya sea en una manera natural o en una manera espiritual. Cuando ustedes cantan este himno, ¿qué entienden por fidelidad? Si usted entiende la fidelidad de Dios de una manera natural, podría pensar que Él es fiel primordialmente en lo referido a las provisiones o bendiciones materiales. Algunas personas, al decir que Dios es fiel, quieren decir que Él es fiel en atender a sus necesidades materiales. Sin embargo, en 1 Corintios 1:9 Pablo dice: “Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión de Su Hijo, Jesucristo nuestro Señor”. Dios es fiel a este respecto, pero quizás no sea fiel para proveerle a usted una mansión o un trabajo bien pagado. No voy a negar el hecho de que Dios es fiel en atender a nuestro bienestar; pero mi punto es que la fidelidad de Dios no corresponde a nuestro entendimiento natural.

Consideren los sufrimientos padecidos por el apóstol Pablo. Él fue llamado, comisionado, encargado y enviado por Dios; pero en todo lugar al que iba tenía problemas. Por ejemplo, en cuanto comenzó a predicar a Cristo, comenzó a padecer persecución. Él incluso tuvo que escapar de Damasco al ser descolgado del muro de la ciudad en una canasta. ¿Quiere decir esto que Dios no fue fiel con Pablo? No, esto quiere decir que la fidelidad de Dios no corresponde a nuestro entendimiento natural.

Cuando creímos en el Señor Jesús, tal vez teníamos la expectativa de gozar de paz y bendiciones, pero en lugar de ello quizás tuvimos muchos problemas y perdimos nuestra seguridad, nuestra salud o nuestros bienes. Cuando algunos cristianos experimentan tales cosas, ellos tal vez cuestionen la fidelidad de Dios y se pregunten por qué Él no impidió que tales tribulaciones les sobrevinieran.

Debemos comprender que al permitirnos pasar por problemas, Dios es fiel en Su propósito en cuanto a volvernos de los ídolos a Dios, llevándonos de regreso a Él mismo. Nuestra paz, seguridad, salud y nuestros bienes pueden, todos ellos, convertirse en ídolos para nosotros, y Dios es fiel en quitarnos estas cosas de modo que bebamos de Él como fuente de aguas vivas. Si nuestra casa o nuestros bienes se convierten en ídolos para nosotros, bebemos de estas cosas y no de Dios. La fidelidad de Dios consiste en tomar medidas con respecto a tales ídolos y en hacer que bebamos de Él.

Dios es fiel en conducirnos a Su economía, y Su economía consiste en que nosotros bebamos a Cristo, comamos a Cristo, disfrutemos a Cristo, absorbamos a Cristo y asimilemos a Cristo, para que Dios pueda obtener Su aumento con nosotros a fin de llevar a cabo Su economía. En esto consiste la fidelidad de Dios.

En lugar de beber a Dios como fuente de aguas vivas, Israel bebió de sus ídolos. Por tanto, Dios usó a los babilonios para tomar medidas con respecto a esos ídolos y también para destruir Jerusalén e, incluso, el templo, el cual se había convertido en un ídolo para ellos. Debemos ver que nosotros no somos mejores que Israel. Todo puede convertirse en un ídolo para nosotros. Pero Dios es fiel en llevar a cabo Su economía. En Su fidelidad Él toma medidas con respecto a nuestros ídolos a fin de que podamos beber de Él. Todos necesitamos beber de Dios como fuente de aguas vivas, recibiendo a Cristo y asimilándolo en nuestro ser, de modo que Él pueda acrecentarse para el cumplimiento de la economía de Dios a fin de que obtenga Su expresión por medio de Su complemento.

Si bien Dios es fiel, nosotros no somos fieles ni castos, pues acudimos a muchos otros maridos. Después de fallarle a Dios quizás recibamos cierto grado de misericordia y gracia, por lo cual nos arrepentimos y sollozamos diciendo: “¡Cuán lamentable es mi situación! Por mucho tiempo no te he amado mucho Señor y he dejado de asistir a las reuniones”. Mientras nos arrepentimos y lloramos, Dios se regocija. Sin embargo, si nos arrepentimos y lloramos en exceso, incluso nuestro arrepentimiento puede convertirse en un ídolo para nosotros. Tal vez testifiquemos en una reunión que nos hemos arrepentido de manera exhaustiva delante de Dios; pero esto puede ser algo de lo que nos jactamos y un ídolo confeccionado por nosotros mismos. Por tanto, después de arrepentirnos, debemos comenzar a beber de las aguas vivas, alabando a Dios, dándole gracias por todo y disfrutando de Él mismo. Esto es lo que Dios desea. Dios no está interesado en ninguna otra cosa, sino en nuestro disfrute de Cristo.


Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.

Back to Top