Agresividad apropiada que requieren los que sirven al Señor, Lapor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-4972-7
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
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Pregunta: Si un cristiano que dice ser Elías, un enviado de Jehová para ayudar a otros, viene a nuestra reunión degrupopequeño, ¿cómo debemos tratarlo?
Respuesta: Simplemente debemos decirle: “Estamos abiertos a todos los que son salvos, pero no recibimos este tipo de hablar. Permítame acompañarlo a la puerta”.
Pregunta: ¿Cómo podemos llegar a conocer la verdadera situación de las personas que contactamos?
Respuesta: A fin de hacer cualquier cosa, debemos tener el conocimiento apropiado. Si ustedes me dieran un ensayo en inglés para corregirlo, pero yo no supiera inglés, podría leerlo cien veces y aún ser incapaz de corregirlo, porque no tengo el conocimiento necesario. A fin de corregir el ensayo necesitaría tener suficiente conocimiento de la gramática del inglés. Igualmente, nuestra capacidad para conocer a las personas depende de dos factores: cuánto hayamos aprendido y cuánto conozcamos el espíritu de otros. No podemos conocer a una persona simplemente escuchando sus palabras; debemos tocar su espíritu con nuestro espíritu. La medida en que hayamos aprendido a ejercitar nuestro espíritu determinará nuestra capacidad para conocer a otros. Esto no se puede aprender en un solo día; sólo se puede aprender con el tiempo. Una persona que todos los días maneja telas puede decirle si una tela es buena o no simplemente al tocarla. Asimismo, si hemos de ser capaces de brindar ayuda a los demás, ello dependerá de cuánto los conozcamos.
Pregunta: Muchos de nosotros de pequeños asistimos a las reuniones de niños; amamos al Señor y a la iglesia, y deseamos servir al Señor a tiempo completo. ¿Cómo debemos conducirnos delante de los santos de más edad que nos vieron crecer?
Respuesta: Éste es un punto difícil. Por un lado, un profeta no tiene honra en su propia tierra (Jn. 4:44; Mt. 13:57), pero, por otro, a medida que usted cambie su modo de hablar, sus gestos y llegue a ser una persona estable y seria, los santos de más edad lo verán con otros ojos. Lo más importante es que siempre se presente apropiadamente delante de las personas. Por esta razón, cuando usted regrese a su localidad, debe ser emprendedor y avanzar para que los demás lo respeten. La actitud que tengan los santos dependerá de cómo ustedes se presenten ante ellos. Eso no significa que seamos pretenciosos o nos demos aires de ser algo, sino que somos reales.
Pregunta: ¿Qué hacemos si un hermano que es débil y ha retrocedido viene a una reunión degrupopequeñoy expresa sus opiniones negativas en cuanto a la iglesia?
Respuesta: Todo depende de las circunstancias. Sin embargo, los hermanos y hermanas necesitan tener un corazón amplio, y necesitan ser considerados con los santos débiles que no han estado reuniéndose por un buen tiempo. No debemos sentirnos ofendidos por lo que digan. Sin embargo, si él hace lo mismo cada vez que viene, debemos pedirle que deje de expresarse negativamente o que mejor se quede en casa. Además, los santos en el grupo pequeño deben orar, pidiéndole al Señor dirección en cuanto a cómo ayudar a tales santos. No debemos ser tan rápidos en corregir la situación. Debemos tener un corazón amplio y paciente, y seguir la dirección que el Señor nos dé en esa situación para brindarle alguna ayuda.
Pregunta: El ochenta por ciento de los santos de mi grupo pequeño son santos de mayor edad que han estado en el grupo hace ya algún tiempo; por esta razón, es fácil para ellos practicar la reunión de grupo como lo han hecho en el pasado. ¿Qué debemos hacer para encaminarlos en la práctica actual?
Respuesta: Ustedes no deben adoptar la práctica presente de forma legalista. No deben ser “reformistas” y tratar de cambiarlo todo una vez que se unan a un grupo pequeño. Simplemente deben reunirse con los santos. Poco a poco, a medida que se ganen su confianza, podrán empezar a hablar con ellos. Incluso si no obtienen ningún progreso en un año, aún tendrán el próximo año. El Señor Jesús es muy paciente con nosotros. Para Él mil años son como un día (2 P. 3:8). Por consiguiente, no debemos estar ansiosos. Nuestra meta es ayudar a los hermanos y hermanas a ejercitar su función orgánica. Algunos de ellos probablemente ya han formado hábitos que son difíciles de dejar; sin embargo, no debemos cortarlos. El Señor operará y levantará a otros que tengan la misma visión y carga que nosotros. Debemos creer en el Señor.
A medida que ustedes jóvenes vayan a servir al Señor, deben evitar empezar a hacer cosas precipitadamente. En lugar de ello, deben ser pacientes. Eso no significa que no deban hacer nada, ni tampoco que deban estar despreocupados o no tener una actitud positiva. Al contrario, deben ser positivos, mostrar preocupación y tener carga, pero, al mismo tiempo, deben comprender que no deben actuar apresuradamente en las situaciones y circunstancias. Es posible que los santos no tengan la misma carga que usted; por lo tanto, debe darle tiempo al Señor para que produzca una atmósfera apropiada. Entonces el punto de vista de los santos cambiará y también su actitud, y habrá mucho que hacer. Podemos comparar esto a un labrador que planta las semillas y labra la tierra en diciembre. Esto es una necedad, pues gastará su esfuerzo en vano. En vez de ello, debe prepararse de forma activa y esperar a que pueda plantar las semillas cuando llegue la primavera.
Ustedes no deben apresurarse a hacer nada. No deben decir: “He participado en el entrenamiento. Ahora siento una carga enorme por cambiar la situación en mi iglesia”. Les garantizo que si hacen esto, fracasarán. Cuando regresen, deben aprender a ser pacientes y sabios. Deben permitir que el Señor cambie el invierno en primavera a Su tiempo. Mientras esperan, deben orar para prepararse y también ejercitarse para progresar. Deben aprender cómo conversar con los santos de más edad. Si no obtienen éxito de una forma, pueden intentarlo de otra manera. Eso es lo que significa ser emprendedor, y ésta es la manera en que debemos aprender a servir al Señor. Deben aprender en todos estos asuntos.
Pregunta: Puesto que el éxito de un grupo pequeño depende de si los líderes tienen una verdadera carga, ¿deberíamos tener un entrenamiento para los que son líderes a fin de recibir toda la ayuda que necesitemos?
Respuesta: Este entrenamiento tiene como propósito exhortarlos a ustedes, los servidores de tiempo completo, a que sean ávidos para aprender, a fin de que cuando se unan a una reunión de grupo pequeño ejerzan su función de manera espontánea. Si es necesario, pueden seguir la dirección del Señor y compartir un poco en cuanto a la dirección actual que el Señor ha dado a la iglesia con respecto a la reunión de grupo pequeño. Su meta no debe ser promover los grupos pequeños ni organizar a los santos en grupos pequeños. Eso es organización. Nuestro deseo es que ustedes ejerzan su función en el Cuerpo y traigan en su interior una pequeña chispa. La iglesia no es una organización; antes bien, la iglesia es como un huerto donde crecen toda clase de árboles. Tal vez algunos árboles no crezcan muy bien por algún tiempo, pero después de cierto tiempo se presentará una oportunidad y ese momento será el más propicio. Debemos seguir reuniéndonos, y el Espíritu Santo nos guiará. Nosotros no somos una organización; no es necesario que tengamos una serie de normas y preceptos. Tenemos al Señor, el Espíritu y la Palabra.
Pregunta: ¿Tiene la iglesia algún plan para fomentar el crecimiento de los hermanos y hermanas? ¿Cómo les ayudamos a los hermanos y hermanas a ser personas que son fieles y prudentes?
Respuesta: La vida de iglesia es una vida que fomenta el crecimiento. Si nos reunimos regularmente, creceremos y seremos alimentados. Al mismo tiempo, la vida de iglesia hace que el don y talento de cada santo se manifieste. Por lo tanto, la vida de iglesia no reprime los santos; al contrario, alienta a todos a que manifiesten su capacidad para que los dones y talentos se manifiesten. Las iglesias deben animar a los hermanos y hermanas a que viajen al extranjero y visiten otros países. Esto es beneficioso. Sin embargo, no queremos convertir estas cosas en reglas, porque la iglesia es el Cuerpo orgánico del Señor; todo en la iglesia depende de la vida.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.