Vida cristiana, Lapor Witness Lee
ISBN: 978-0-7363-0260-9
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
ISBN: 978-0-7363-0260-9
Copia impresa: Living Stream Ministry disponible en línea
Font Size
El Dios Triuno como el contenido de nuestra vida cristiana comprende la divinidad de Dios en Su Trinidad Divina: el Padre, el Hijo y el Espíritu (Mt. 28:19; 2 Co. 13:14). Él también incluye la humanidad del Dios-hombre Jesús en Su encarnación (Hch. 16:7; Fil. 1:19b).
El Dios Triuno procesado y consumado está compuesto de la muerte de Cristo que todo lo resuelve y le da fin a todo (He. 9:26, 28; Ro. 6:6; Gá. 5:24; He. 2:14; Jn. 12:31; Ef. 2:15; Col. 1:20; Jn. 12:24). Sería útil recordar estas referencias bíblicas. Hebreos 9:26 se refiere a la solución del problema del pecado. Cristo se ofreció una vez para resolver el problema del pecado. Luego Hebreos 9:28 dice que la muerte de Cristo resolvió el problema de nuestros pecados. Romanos 6:6 dice que nuestro viejo hombre ha sido crucificado con Cristo. Luego Gálatas 5:24 nos dice que la muerte de Cristo crucificó nuestra carne y sus deseos. Hebreos 2:14 dice que la muerte de Cristo destruyó a Satanás, y Juan 12:31 dice que Su muerte juzgó al mundo. Efesios 2:15 es el versículo donde se dice que la muerte de Cristo abolió todas las ordenanzas. Estas ordenanzas no sólo incluyen aquéllas establecidas por nosotros los seres humanos, sino también las que fueron ordenadas por Dios. Todas las ordenanzas fueron quitadas por Cristo en la cruz. Colosenses 1:20 además revela que la muerte de Cristo tomó cuidado de todas las cosas creadas. Por medio de Su muerte, todas las cosas creadas que se habían perdido fueron traídas de nuevo a Dios y reconciliadas con Dios. Estos versículos muestran que la muerte de Cristo terminó con todas las cosas negativas del universo. Juan 12:24 es un versículo que habla del lado positivo de la muerte de Cristo, diciéndonos que Cristo como el grano único cayó en la tierra para morir y producir muchos granos. Ésta es la muerte que produce vida.
El Dios Triuno procesado y consumado también está compuesto de la resurrección de Cristo que todo lo produce (Hch. 13:33; 1 P. 1:3; 1 Co. 15:45). ¿Qué fue lo que se produjo en la resurrección de Cristo? Primero, Cristo fue producido como el Hijo primogénito de Dios. En segundo lugar, Su resurrección produjo los muchos hijos de Dios como miembros que constituirían el Cuerpo de Cristo, la iglesia. Finalmente, en Su resurrección se produjo el Espíritu vivificante. Hechos 13:33 muestra que Cristo como el Hijo unigénito de Dios nació de nuevo en la resurrección para ser el Hijo primogénito de Dios. Luego 1 Pedro 1:3 nos revela que nosotros, los creyentes de Cristo, nacimos en la resurrección de Cristo para ser los muchos hijos de Dios. Finalmente, 1 Corintios 15:45 nos revela que Cristo, el postrer Adán, llegó a ser el Espíritu vivificante en Su resurrección. Así que, la resurrección de Cristo produjo estas tres cosas principales: el Hijo primogénito de Dios, los muchos hijos de Dios como miembros de Cristo que constituyen Su Cuerpo, la iglesia, y el Espíritu vivificante. Ésta es la razón por la cual digo que ésta es la resurrección que todo lo produce.
El Dios Triuno procesado y consumado también está compuesto de la ascensión de Cristo que todo lo trasciende (Ef. 1:20-21). Hay muchas cosas que son negativas para nosotros como cristianos. Todos los ángeles caídos que están en el aire son negativos para nosotros. Pero la ascensión de Cristo venció y sojuzgó todas estas cosas negativas. En Su ascensión, Él lo trascendió todo, subiendo de la tierra y pasando por el aire para llegar al tercer cielo muy por encima de todo. Así que, podemos ver que los elementos del Dios Triuno procesado y consumado incluyen Su muerte que todo lo resuelve y le da fin a todo, Su resurrección que todo lo produce, y Su ascensión que todo lo trasciende. Cristo como el centro de la Trinidad Divina ha llegado a ser un compuesto de Su muerte, resurrección y ascensión.
Esta persona compuesta es tipificada por el santo ungüento compuesto mencionado en Éxodo 30:22-31. El ungüento compuesto no era simplemente aceite; era un ungüento. Al aceite de oliva como elemento básico se le añadían, formando un compuesto, cuatro especias: mirra, canela, cálamo y casia. Los mensajes del ciento cincuenta y siete al ciento sesenta y seis del Estudio-vida de Éxodo tratan de la verdad acerca del ungüento compuesto. Les animo a que lean o estudien estos mensajes. Todos los elementos más todos los números relacionados con el ungüento compuesto representan la divinidad, la humanidad, el vivir humano, la muerte y la resurrección de Cristo. Algunos maestros de la Biblia reconocieron que el ungüento compuesto era un tipo del Espíritu Santo. Pero ningún maestro de la Biblia nos ha dado un análisis del ungüento compuesto en todos sus aspectos. En nuestro propio estudio vimos que el aceite de oliva tipifica al único Dios, la mirra tipifica la muerte preciosa de Cristo, la canela tipifica la dulzura y eficacia de la muerte de Cristo, el cálamo tipifica la resurrección preciosa de Cristo, y la casia tipifica el poder repelente de la resurrección de Cristo. Hoy en día nuestro Dios es el Dios compuesto.
Comencé a hablar de esto a partir de 1954. En un entrenamiento en Hong Kong en aquel año, dije que en el Espíritu está la muerte y la resurrección de Cristo. Recibí ayuda del capítulo 5 de la obra maestra de Andrew Murray llamado The Spirit of Christ [El Espíritu de Cristo], donde él recalca que hoy en día el Espíritu incluye tanto divinidad como humanidad. Desde que llegué a los Estados Unidos, esta visión del Espíritu según es tipificado por el ungüento compuesto, se ha hecho más y más clara. Creo que hoy esta revelación está en su punto culminante, su “mediodía”.
Todo el contenido, todos los elementos, del Dios Triuno procesado y consumado han sido compuestos y han llegado a su consumación para ser el Espíritu todo-inclusivo. Este Espíritu todo-inclusivo es el Dios Triuno consumado, la consumación del Dios Triuno, por medio de la muerte y resurrección de Cristo (Jn. 7:39; 1 Co. 15:45; 2 Co. 3:17; Gá. 3:14; Ap. 2:7; 22:17). Juan 7:39 dice que aún no había el Espíritu, porque Jesús no había sido aún glorificado. En aquel entonces en los Evangelios, el Espíritu Santo estaba allí, el Espíritu de Dios estaba allí, mas no el Espíritu. Esto se debe a que Cristo no había sido aún glorificado. Esto significa que Cristo todavía no había pasado por Su muerte para entrar en Su resurrección. Jesús fue glorificado al ser resucitado (Lc. 24:26). En 1 Corintios 15:45 se nos revela que Cristo, el postrer Adán, llegó a ser el Espíritu vivificante en Su resurrección. En 2 Corintios 3:17 se nos dice que el Señor es el Espíritu, y Gálatas 3:14 dice que este Espíritu todo-inclusivo, el Espíritu, es la bendición del evangelio neotestamentario. La bendición del evangelio no es simplemente la redención, el perdón de pecados, la justificación, la regeneración o la salvación. La bendición del evangelio es una persona, el Espíritu todo-inclusivo como la consumación del Dios Triuno procesado y consumado.
El Espíritu todo-inclusivo y la muerte todo-inclusiva de Cristo y Su resurrección todo-inclusiva, han llegado a ser los tres elementos principales por los cuales los creyentes de Cristo viven la vida cristiana para la vida de iglesia. Por lo tanto, para conocer la vida cristiana, tenemos que conocer estos tres elementos.
Nota: Esperamos que muchos se beneficien de estas riquezas espirituales. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de confusión, les pedimos que ninguno de estos materiales sean descargados o copiados y publicados en otro lugar, sea por medio electrónico o por cualquier otro medio. Living Stream Ministry mantiene todos los derechos de autor en estos materiales, y esperamos que ustedes los que nos visiten respeten esto.